En medio de la crisis generalizada que azota Cuba autoridades de la provincia Sancti Spíritus iniciaron la cría de patos pequineses como alternativa alimentaria de la población.
La agencia oficialista Prensa Latina informó que la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro, recibió este viernes el primer lote de 5,000 patos raza Pekín, y prevé recibir el triple de esa cifra.
José Luis García, director pecuario de la empresa, dijo que en los próximos días se recibirán otras 15.000 crías que serán distribuidas en las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) de Peralejo, Las Nuevas, El Cedro y Sur del Jíbaro.
Supuestamente en estos establecimientos hay condiciones para el pastoreo de los patos y su cuidado nocturno en corraletas móviles, en medio de la ola de robos en las zonas agropecuarias del país.
Si bien los especialistas aseguran que el ganso blanco llegó a Cuba hace más de 35 años desde Canadá, en la isla se usa como extensor y para la elaboración de picadillo. Rara vez se vende el producto fresco.
"En la actualidad se decidió su extensión en el programa alimentario de la avicultura cubana", por su "rápido crecimiento y multiplicación, dóciles al pastoreo, así como adaptación a las condiciones más variadas", detalló PL.
Agrega que en unos 70 días los patos logran la talla comercial de entre 2.2 y 2.3 kilogramos, con una tasa mínima de mortalidad.
"La crianza certificada por sanidad de estas aves se desarrolla en espacios abiertos y áreas cortadas donde se alimentan y desarrollan con los granos que quedan en el suelo, dejados por las máquinas, y otras semillas de plantas silvestres", explica el medio de prensa.
El primer lote llegó de una planta incubadora de Matanzas, en el occidente de la isla.
El resto de estas aves llegará de distintas entidades, en especial de la Unidad Empresarial de Base Planta de Incubación Eduardo García Lavandero, conocida como El Porvenir, ubicada en Artemisa, también en el occidente.
Cuba ha apostado por la producción de carnes que no requieran de la importación de piensos.
En enero pasado, la empresa avícola de Sancti Spíritus informó que había iniciado la cría de gallinas semirrústicas y codornices para suplir la escasez de huevos en ese territorio, en el contexto de la crisis alimentaria que padece Cuba.
De acuerdo con un reporte del telecentro local, desde hace un año se recuperó la unidad de producción avícola Jíquima 2, donde se atienden entre 38,500 y 38,700 aves que aportan un promedio de 8,500 huevos diarios.
También en Las Tunas se apostó por el pastoreo de gallinas rústicas ante la falta de pienso para alimentarlas, y en Cienfuegos se impulsaba la cría de codornices para paliar la escasez de alimentos que padece la población cubana.
Sin embargo, las familias siguen pasando hambre. Las iniciativas son totalmente ineficientes para resolver la problemática.
Además del bajo acceso a los alimentos de calidad y la escasez, la inflación generalizada provoca que un cartón de 30 huevos cueste 3,000 pesos, unos 25 dólares al cambio oficial.
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