La música latina ha sido testigo de innumerables colaboraciones icónicas, pero pocas tan memorables como la interpretación de "Químbara" por la inigualable Celia Cruz y el talentoso Marc Anthony. Esta canción, que se ha convertido en un himno de la música latina a nivel mundial, resuena con fuerza cada vez que se escucha su pegajoso estribillo "Químbara, cumbara cumba quimbambá".
"Químbara" no es simplemente una palabra sin significado, sino un intento brillante de verbalizar el sonido de los tambores. En el escenario, las voces poderosas de Marc Anthony y Celia Cruz, conocida cariñosamente como la Reina de la Salsa, se fusionan para ofrecer una interpretación que irradia energía y evoca una invitación a la celebración.
Sin embargo, detrás de esta icónica canción hay una historia fascinante. Johnny Pacheco, uno de los grandes de la música latina, relató en una entrevista cómo se encontró con la canción. Durante una visita a Puerto Rico, un joven llamado Junior Cepeda se le acercó con la propuesta de escuchar una canción que había compuesto. A pesar de que Pacheco inicialmente olvidó la propuesta del joven, finalmente escuchó a Cepeda cantar el pegajoso estribillo de "Químbara" y quedó impresionado al instante.
Junior Cepeda, con solo 17 años en ese momento, demostró ser un talento prodigioso. A pesar de su corta vida, dejó una marca indeleble en la música latina. Pacheco llegó a grabar 10 temas de Cepeda y colaboraron estrechamente hasta el trágico asesinato de Junior en Nueva York a la temprana edad de 22 años.
La combinación de la historia detrás de "Químbara" y la interpretación magistral de Celia Cruz y Marc Anthony hacen de esta canción una joya atemporal en el repertorio musical latino. Es un recordatorio del poder de la música para unir culturas, generaciones y corazones.
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