Aunque técnicamente se encuentra en Mayabeque, Hershey es un pueblo al cual se llega fácilmente desde La Habana. Es uno de los rincones más interesantes y unas de las ruinas que más duelen de lo que fue unas de las comunidades más desarrolladas y autosustentables del país. Su nombre se debe a Milton Hershey, fundador del pueblo y de la todavía famosísima marca de chocolates homónima. Del poblado construido gracias al chocolate solo quedan algunas pocas casas en pie, otras, que no corrieron la misma suerte, se yerguen entre matorrales y basura acumulada, así como los parques, cine y la central que procesaba el azúcar para las conocidas confituras. Es el sitio perfecto para explorar y tomar fotos del último pueblo en Cuba construido al estilo de los suburbios norteamericanos.