Este martes 7 de febrero, por primera vez en la historia de Estados Unidos, un vicepresidente ―que es presidente del Senado por mandato constitucional― ha tenido que emitir un voto de desempate para poder desatascar un puesto del Gabinete presidencial en la Cámara Alta.
Es lo que ha ocurrido con el nombramiento de la multimillonaria Betsy DeVos, que desde hoy fungirá como Secretaria de Educación de EE.UU, gracias en buena medida al voto salvador, in extremis, de Mike Pence, según declaran medios de prensa.
Con 50 senadores a favor y 50 en contra, fue Pence quien inclinó la balanza.
Además del voto en contra de los 48 senadores demócratas, dos senadoras republicanas votaron también en contra del nombramiento.
La multimillonaria Betsy DeVos enfrentó duras críticas por parte de los demócratas en el Senado, quienes intentaron, con un buen número de discursos previos, evitar el nombramiento.
Los demócratas cuestionaron su compromiso con la educación pública y denunciaron sus conflictos de interés para el nuevo cargo.
Los republicanos, en cambio, defendieron a DeVos como alguien dispuesta a reformar el sistema y a reducir la influencia del Gobierno federal en la Educación.
También creen que ella podrá elevar la calidad educativa en el interés de ampliar las oportunidades para los niños desfavorecidos. Sin embargo, los demócratas lo dudan y se han opuesto frontalmente, argumentando, una y otra vez, que DeVos no tiene experiencia ni está cualificada para el cargo.
Tanto demócratas como republicanos recibieron miles de llamadas de sus votantes pidiendo una firme oposición a la nominación de DeVos, aunque finalmente no ha servido de nada.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: