- 500 ml. de leche entera
- 4 yemas de huevos
- 125 gramos de azúcar blanco
- 50 gramos de Maizena
- 1 cucharada de vainilla
- Cáscara de limón
- 1 ramita de canela
Primeramente, recomendamos infusionar la leche con que prepararemos la crema pastelera. Separa en un vaso 150 ml de leche. En una cazuela ponga el resto de la leche a calentar a fuego medio. Antes de que hierva retírela del fuego.
Lave el limón y corte unos trozos de cáscara, evitando usar la parte blanca. Añádalo a la leche caliente. Agregue además la vainilla, la canela en rama y tape la cazuela por 30 minutos. De esta forma se infusionará la leche y adquiere un delicioso aroma.
En la leche que había reservado previamente, diluya la Maizena. Remueva bien para que luego no queden grumos.
En una cazuela ponga las yemas de los huevos bátalas añadiendo poco a poco el azúcar. Hágalo preferiblemente con unas varillas para que no se pegue. Luego añada la leche con la maicena y siga removiendo, para conseguir una mezcla homogénea y sin grumos.
Añada poco a poco la leche infusionada, que debe estar tibia. Cuélela previamente para retirar las cáscaras de limón y la canela en rama.
La mezcla final que se obtiene póngala a cocinar a fuego bajo y remueva continuamente con una espátula o cuchara de madera. En unos minutos verá cómo va espesando la crema.
Cuando adquiera el punto denso retírela del fuego y pásela a un recipiente en que la pueda conservar tapada en el refrigerador, hasta que vaya a usarla. No debe pasar de dos a tres días.
Esta crema es muy útil para hacer señoritas, brazos gitanos y relleno de panetelas. Espero que disfruten la receta. ¡Buen apetito!!