- 520 gramos de masa de hojaldre
- dulce de guayaba en barra
- 2 cucharadas de mantequilla
Para esta receta utilizaremos masa de hojaldre ya elaborada. Si usted desea hacer su propia masa le recomiendo visitar el blog de María Lunarillos. Esta cocinera presenta una receta muy detallada con todos los pasos.
Seleccione en un mercado el hojaldre de la marca de su preferencia. Estará listo para hornear. Generalmente la masa viene dividida en dos partes y ambas sobre papel vegetal para colocar directo en la bandeja del horno.
Extienda la primera mitad con el papel vegetal en la bandeja de su horno. Coloque encima, de modo ordenado, trozos uniformes de dulce de guayaba. Deben mantener la misma distancia unos de otros, de modo que queden al centro de lo que luego será su pastelito. Fíjese en la foto y ponga más o menos guayaba según su gusto.
Precaliente el horno a 200ºC.
Extienda cuidadosamente la segunda parte de la masa sobre la que tenía preparada con el dulce de guayaba en la bandeja. Cúbralo y marque la forma del pastel.
Con un corta-pizzas o con un cuchillo, corte la masa intentando moverla lo menos posible. De esta forma cuando termine de hornear los pasteles será fácil dividirlos. Con un pincel de cocina úntelos con mantequilla.
Hornee a 200ºC hasta que estén dorados y crujientes. El tiempo dependerá de las características particulares de cada horno. Intente que la bandeja reciba calor de modo uniforma por arriba y por abajo, para evitar que se doren más de un lado que de otro.
Saque sus pasteles del horno y recuerde que debe esperar un poco antes de comerlos porque en su interior la guayaba se mantiene muy caliente. Córtelos y manténgase atento porque esos pasteles calientes… ¡vuelan en las cocinas!!
¡Buen apetito!!!