Ciego queda campeón del béisbol cubano por segundo año consecutivo

Luego de protagonizar un histórico empate con tres triunfos consecutivos, los pinareños le dieron la segunda corona seguida a los Tigres en un desbalanceado séptimo encuentro.

Decepcionante y estrepitosa fue la caída Pativerde en este juego definitivo. No solo su buen picheo se vino abajo, con 8 carreras permitidas, sino que apenas bateó seis indiscutibles para recibir una lechada iniciada por Dachel Duquesne y concluida por Yunier Cano, con dos capítulos perfectos.

Ciego comenzó a afincar su victoria con par de anotaciones en el tercer capítulo por batazos impulsores de José Adolis García y Yoelvis Fiss, que sacaron de la lomita al abridor Erlis Casanova. Con su lineup reestructurado, los Tigres vinieron hoy muy productivos e hicieron racimos de 3 en el quinto y sexto innings, y ya no necesitaron nada más para volver a colgarse la corona.

Osvaldo Vázquez fue el mejor bateador del juego, de 4-3, mientras Guillermo Avilés jonroneó y empujó 2, al igual que José Adolis y Luis Robert Moirán.

En resumen, Ciego de Ávila quedó a un paso de la barrida tras ganar los tres primeros choques de la gran final. Sin embargo, Pinar del Río devolvió las tres victorias, lo que no se sabe si habla bien de Pinar, mal de Ciego, o peor de nuestra Serie Nacional, sus defectos y su inestabilidad, que inevitablemente han terminado expresándose en un desempeño inconsistente de los equipos.

Pinar es un equipo grande, pero ha sido inestable e inconsistente como lo fueron, a lo largo de toda la campaña, Ciego, Industriales, Matanzas, Las Tunas y Holguín, por solo hablar de los mejores en esta temporada. En nada ayudó que la 55 Serie Nacional parara tantas veces, por el Premier 12, por la Serie del Caribe o por el juego contra Tampa Bay. De hecho, será esta Serie tristemente recordada por sus tortuosas paradas, innecesarias y evitables por demás.

Tantas han sido las quejas venidas de todas partes, que es posible que el próximo año se eviten estas pausas. También se ha anunciado el enésimo cambio de la estructura de la Serie. Además, las autoridades del béisbol cubano han dicho que comenzarán las contrataciones masivas de jugadores en las ligas del Caribe. Todos estos cambios pudieran cambiarle el rostro total y definitivamente a nuestra temporada doméstica. Lo que está por ver es si redundarán en una mejora de su calidad.