La expulsión del biólogo Ariel Ruiz Urquiola del Centro de Investigaciones Marinas (CIM) y del bioquímico Oscar Casanella llegará a la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra y a la sede de Amnistía Internacional en Londres para obtener apoyo internacional, según reveló Diario de Cuba.
En el caso de Urquiola su expulsión se llevó a cabo en abril de este año por absentismo laboral. En el momento de su marcha estaba al mando de un proyecto de cooperación internacional sobre la fauna y flora de la Sierra de los Órganos.
El científico apeló su expulsión, que fue ratificada por el Órgano de Justicia Laboral de la Universidad de la Habana (UH), y sigue a la espera del fallo del Tribunal Municipal de Plaza de la Revolución, el cual debe comunicarlo de forma pública el próximo 12 de julio.
Según la citada información, el propio letrado de la UH, Gilberto Tabares García, admitió ilegalidades en la comparecencia pública del 18 de mayo, en la cual se ratificó la expulsión de biólogo por parte del Órgano de Justicia Laboral de la Universidad de la Habana.
En concreto explicó que la celebración de dicha comparecencia se llevó a cabo en horario de trabajo y tuvo una escasa divulgación en los pasillos y aulas de la Universidad, lo que incumple el artículo 116 del Código del Trabajo.
Pese a todo, Tabares confirmó las ausencias de Urquiola de su puesto de trabajo y aseguró que, todas las que se produjeron a partir del 14 de marzo estaban injustificadas. Sin embargo pasó por alto las presiones a las que fue sometido desde el 2015.
Trasfondo "contrarrevolucionario" de la expulsión
El abogado pidió al Tribunal que mantenga la expulsión ya que Ruiz Urquiola no estaba en consonancia con los principios de la Universidad al estar en contacto con "medios contrarrevolucionarios" como Diario de Cuba.
Por su parte la presidenta del Órgano de Justicia Laboral (OJL) de la UH, Ileana Sulueta, admitió las ilegalidades de la OJL, entre ellas que el secretario de este estamento, Julio Fuentes; no estuviera presente en la comparecencia del 18 de mayo, pese a ser una de las personas que firmó la ratificación de la expulsión.
Además tres de los cinco integrantes de la OJL no llegaron a ratificar la expulsión, ya que se negaron a hacerlo. Esta situación llevó a Tapia Pacheco, abogado de Urquiola, a denunciar todas las presiones que su cliente se encontró en el trabajo día a día hasta el punto de padecer un "síndrome ansioso y depresivo" que le imposibilitó trabajar.
Según el letrado ningún médico quiso emitir un justificante del estado de salud del biólogo, después que se le venciera el último aval médico. Los sanitarios que le atendieron señalaron que no tenían competencia para emitir un informe médico. Hasta que Urquiola no acudió a los especialistas del Centro de Salud Mental, en la localidad de Playa, no recibió atención médica.
Irregularidades en la comparecencia pública
La Audiencia para ratificar la expulsión fue interrumpida al mediodía y se reanudó horas después porque en la misma sala se iba a celebrar un juicio sobre el tráfico ilegal de 16 sacos de café de Santiago de Cuba hasta La Habana.
Estas ilegalidades fueron censuradas por la hermana del científico que lamentó la "poca seriedad" a la hora de llevar a cabo la expulsión de un "doctor en Ciencias Biológicas y la paralización 'sine die' de un proyecto internacional".
En la Audiencia, el Tribunal Municipal solo admitió a dos testigos de los cuatro que llevó el reclamante, éstos eran la hermana de Ruiz Urquiola y el doctor Emir Pérez Bermúdez, uno de los integrantes del proyecto científico.
(Imagen de Encubahoy).
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: