El gobierno de Vladimir Putin confiscaría todos los bienes de los Testigos de Jehová, con 175 mil miembros en Rusia, tras haber catalogado a este grupo religioso como una “organización extremista”, reportó la agencia RT.
El Ministerio de Justicia de Rusia solicitó al Tribunal Supremo de ese país que confisque los bienes de los Testigos que se encuentren en territorio ruso. Días atrás, la portavoz del Ministerio, Svetlana Borísova, había declarado que el retiro de los bienes de una organización es un procedimiento común tras la liquidación de sus actividades.
De acuerdo con la nota de RT, se ha destacado que los Testigos de Jehová, una organización internacional con 8 millones de seguidores a nivel mundial, cometieron múltiples infracciones administrativas en la nación rusa.
Entre las infracciones se encontraría la “difusión de literatura extremista”, aunque no se detalla qué tipo de mensaje divulgaba dicha literatura.
En el mes de febrero de 2017, las autoridades rusas levaron a cabo una inspección no programada y concluyeron que esta organización había violado los reglamentos y la legislación rusa respecto a la lucha contra las actividades extremistas, concluyó la nota.
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