El Tribunal Constitucional chileno ratificó el pasado lunes 21 de agosto el proyecto de ley que despenaliza el aborto en tres circunstancias: la inviabilidad fetal, el riesgo de muerte de la mujer y embarazados frutos de una violación.
El proyecto de ley había suscitado un gran debate en la esfera política y social chilena. Así, pese a que fue aprobado hace un mes por el Congreso, fue recurrido ante el Tribunal Constitucional por dos senadores de la oposición.
"Despenalizar la interrupción del embarazo en estas tres causales es una base de protección y dignidad para cada una de nuestras compatriotas", declaró Michelle Bachelet, la presidenta del país. La mandataria había convertido esta iniciativa es uno de los proyectos estrella de su gobierno.
Ahora tras la aprobación del aborto en estos supuestos, Chile deja de forma parte de la lista de países que prohíben el aborto en toda circunstancia. En esta situación se encuentran en estos momentos seis países del mundo: Nicaragua, República Dominicana, El Salvador, Haití, Malta y Honduras
Por otro lado, la despenalización parcial del aborto supondrá, según sus partidarios, que se reduzca de manera importante la práctica de abortos clandestinos en el país, una cifra que se estima en 70.000 abortos anuales.
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