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Representantes de Cuba y Estados Unidos se reunieron el martes en Washington para la VI Reunión de la Comisión Bilateral, donde se discutieron, entre otros aspectos, los “incidentes” que afectaron al personal diplomático norteamericano que radica en la Isla.
Durante el encuentro, “EE.UU. reiteró su profunda preocupación por la seguridad de la comunidad de la Embajada en La Habana y la urgente necesidad de identificar la causa de estos incidentes y asegurar que cesen”, reza un comunicado emitido este miércoles por la Casa Blanca.
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Mientras, una nota divulgada por la Cancillería cubana afirmó que el gobierno de La Habana “cumple rigurosamente sus obligaciones en lo que se refiere a la protección de los diplomáticos” y que “jamás ha perpetrado ni perpetrará acciones de esta naturaleza, ni ha permitido ni permitirá que su territorio sea utilizado por terceros con ese propósito”.
Los delegados cubanos, encabezados por Josefina Vidal, enfatizaron que las autoridades cubanas “tienen gran interés en esclarecer este asunto y concluir la investigación que está curso, por indicación del más alto nivel del gobierno”.
El gobierno de la Isla también reiteró el rechazo al retroceso en las relaciones bilaterales, a las medidas de recrudecimiento del bloqueo y “a la retórica confrontacional” del presidente Donald Trump.
“A raíz de las declaraciones irrespetuosas, injerencistas e inaceptables del presidente Donald Trump durante su discurso en la Asamblea General de las Naciones Unidas, realizadas cuando transcurría la Comisión Bilateral, la delegación cubana expresó una enérgica protesta”, concluyó la misiva.
Según el comunicado de Washington, ambas delegaciones también revisaron las prioridades de la Administración y las áreas de participación en los intereses de EE.UU. y el pueblo cubano, incluyendo los derechos humanos, la aplicación de los Acuerdos sobre Migración y la protección de la seguridad nacional y la salud pública de los estadounidenses.
Por la parte norteamericana, la reunión fue presidida por John Creamer, subsecretario adjunto para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.
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