Hace poco más de un año, se volvió viral una imagen que mostraba a bebés recién nacidos acomodados en cajas de cartón en un hospital obstétrico de Venezuela. Hoy, otra impactante foto sobre el sistema de salud en ese país suramericano vuelve a darle la vuelta al mundo.
Tres mujeres embarazadas, dos de ellas completamente desnudas, aparecen en pleno trabajo de parto acostadas sobre las frías sillas de la sala de espera de un hospital perteneciente al Instituto Venezolano de Seguros Sociales (IVSS).
A raíz de la indignación levantada en las redes sociales por estas fotografías, altos funcionarios chavistas como la viceministra de Salud, Linda Amaro, y el ministro de Comunicación e Información, Ernesto Villegas, culparon al actual gobernador del estado Lara, Henry Falcón, integrante de la opositora Mesa de Unidad Democrática.
El hospital donde fueron fotografiadas las parturientas, Pastor Oropeza, también se vio obligado a justificar el suceso vía Twitter, culpando igualmente al gobierno regional por la falta de agua en otros hospitales maternos, lo que provocó en este caso el colapso del referido centro médico.
“Producto de las múltiples fallas en hospitales de la región larense nuestro centro de salud a terminando siendo el único en operatividad”, escribió el hospital en la plataforma.
Las imágenes fueron tomadas por las estudiantes de medicina Mariam Valiño y María Brizuela, de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), quienes fueron apresadas inmediatamente. Según informó el periodista local Carlos Iván Suárez, ambas fueron liberadas el lunes.
De acuerdo con reportes de la prensa venezolana, el pasado 26 de septiembre otras cinco mujeres dieron a la luz en el suelo del hospital Dr. Raúl Leoni en San Félix, estado Bolívar. Anteriormente, a principios de año, el diputado venezolano José Manuel Olivares había denunciado la existencia de gusanos en la sala de parto del hospital Clínico Universitario de Caracas.
“La insalubridad en el Clínico es tal que llegó al punto de tener gusanos en las camas de parto”, dijo el médico, quien declaró que “los médicos se dieron cuenta que salían vermes de los colchones de las camas de parto, notificaron y la dirección no cerró el área”.
“No cerraron el área para su limpieza y desintoxicación sino que se limitaron a sacar las camas con gusanos y seguir atendiendo parturientas. Las mujeres atendidas en estas salas de parto y los niños que ahí nacen corren grave peligro de contaminación. ¡Se trata de sus vidas!”, expresó el diputado en Twitter.
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