Isabela de Sagua, un poblado costero de 21 mil habitantes al norte de Villa Clara, fue fuertemente azotado por el huracán Irma a su paso por el litoral de Cuba el pasado mes. Según reportes oficiales, cientos de familias perdieron casi la totalidad de sus bienes y sus hogares como consecuencia del fenómeno meteorológico.
“Casas, escuelas, comercios, torres de electricidad y comunicación derrumbadas; fango y lodo por todas partes, y lo más doloroso era ver las personas laceradas por la pérdida de sus viviendas y la mayoría de los bienes adquiridos al cabo de tantos años”, relató al diario Granma el periodista Ángel Freddy Pérez.
El articulista, que compara el estado de Isabela con “un sitio bombardeado por la metralla nazi durante la Segunda Guerra Mundial”, narra que varios campesinos y operarios agrícolas han comenzado a fungir como constructores y albañiles improvisados para ayudar a los más afectados con pérdidas totales o parciales de sus viviendas.
Según el texto, a 72 horas del paso del huracán, técnicos de la estatal Copextel y de la Empresa de Servicios Técnicos y Especializados lograron recuperar 174 televisores dañados, 455 refrigeradores, 85 lavadoras, 101 ollas, 180 cocinas eléctricas, 48 ventiladores y 14 cajas decodificadoras, además de ser entregado un teléfono a cada familia residente que tuviera esa facilidad.
Asimismo, fueron entregadas (no se detalló si de forma gratuita) cunas y colchones a todas las madres que tuvieran niños entre uno y tres años, así como a las embarazadas que van a dar a luz en los próximos días.
De acuerdo con Dayana Pérez Antúnez, empleada del mercado industrial del territorio, todas las personas encamadas, postradas, en estado de embarazo o mayores de 65 años, han recibido distintos bienes de asistencia como toalla, colcha, juego de sábanas, cubo, escoba, jabones de baño y de lavar, entre otros artículos.
La nota no especifica si estos artículos provienen de las numerosas donaciones que varios países han realizado o son subsidios del Estado.
Los núcleos familiares también recibieron varios productos, estos sí derivados de una donación del Programa Mundial de Alimentos, que incluyó arroz, granos y carne enlatada. Además, fueron entregados más 1 500 colchones, 567 módulos de aseo y 535 ajuares para el hogar, de acuerdo con Digna Morales, directora del sectorial de Comercio en Villa Clara.
Hasta la fecha, recoge el diario, han sido repartidas de igual forma unas 3520 tejas de zinc y más de 4500 de fibrocemento, además de otros materiales de la construcción.
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