El pasado 26 de septiembre el Ministerio de Comercio Interior ordenó la racionalización de los huevos en las zonas más afectadas por el huracán Irma, incluida La Habana.
Con esta nueva medida, solo se pueden comprar cinco huevos adicionales por cada persona inscrita en la libreta de abastecimiento. Anteriormente, las bodegas vendían esta cantidad a 0.15 centavos y a 1.10 los que quisiera el consumidor. Ahora sólo corresponden cinco y al precio de los que se vendían por la libre (1.10).
Fuentes consultadas por CiberCuba aseguran que ahora mismo en La Habana existe un férreo control sobre la venta de huevos en el mercado negro, lo que dificulta aún más el acceso a este producto que en la calle se vende por entre 3 y 4 pesos cubanos la unidad. Incluso ha habido detenciones de personas dedicadas a la comercialización de la principal fuente de proteína de la dieta del cubano medio.
Pero los agentes del orden no sólo persiguen a los vendedores sino también a los compradores de huevos. Según ha podido saber CiberCuba, los paran por la calle, les preguntan dónde han adquirido los huevos y los multan. Tan estricto es el control policial que revisan hasta los taxis del aeropuerto.
En determinadas bodegas de La Habana han comenzado estos días a repartir dos huevos por persona (los que tocan por la libreta), además de cinco extra a cada núcleo familiar. Sin embargo, las familias consideran que este reparto no soluciona el problema de escasez de huevos que está padeciendo la capital cubana.
Otra fuente comenta a CiberCuba que tampoco hay huevos en las tiendas en CUC, para desesperación de las familias que no saben cómo equilibrar una dieta familiar ya de por sí limitada.
El huracán Irma provocó daños en 466 granjas avícolas del país, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), citados por Granma. Aunque en ese reporte el diario oficialista dijo que de ese total, 348 ya estaban listas, al parecer la crisis de los huevos va para largo.
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