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Las granjas urbanas y los organopónicos de Matanzas son quienes garantizan en gran parte las verduras y hortalizas que consumen escuelas, hospitales y casas de abuelos de la provincia.
Así lo confirmó a TVYumurí Modesto González Acevedo, especialista principal de la agricultura urbana en el territorio, quien afirmó que el excedente se oferta a la población en los puntos de venta, aunque no alcanza a suplir la demanda.
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La provincia cuenta con 12 fincas municipales de semillas. Pero según el especialista, la empresa no dispone de las simientes necesarias y certificadas para enfrentar la campaña de siembra.
“Hay muchos organopónicos que debido al alto costo que tienen estas semillas, las producen ahí mismo y garantizan la calidad de los cultivos. Cada unidad tiene un punto de comercialización. No le voy a decir que la venta dura las ocho horas del día, pero sí en la mañana, fundamentalmente”, añadió.
El descenso de las temperaturas de las últimas semanas ha beneficiado el crecimiento de hortalizas y condimentos en estas instalaciones. En El Triángulo, que posee 0.8 héctareas de extensión y 127 canteros, sobresalen las hortalizas de hojas como la lechuga, la acelga, la col y la espinaca, así como condimentos frescos: cebollino, cebolla y ajo puerro.
Su administrador, José Rodríguez Abreu, explicó que aún no han comenzado a abastecer a la población en una gran cuantía, pues es ahora que se están cosechando los productos.
Otras unidades, como La 23 de agosto, La Dignidad o los Camilitos, ubicadas en la periferia de la ciudad, mantienen un suministro estable, garantizado por el empleo de materia orgánica y productos biológicos, un adecuado esquema de siembra y atenciones sistemáticas a la cosecha.
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