De cómo los dos conventos de San Francisco de Asís en Cuba dejaron de ser iglesias

Por una asombrosa coincidencia dos Conventos de San Francisco de Asís erigidos en Cuba dejaron de ser templos religiosos hace siglos.

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Convento San Francisco de Asís en La Habana Foto © Fotoember

Este artículo es de hace 6 años

Por una asombrosa coincidencia dos Conventos de San Francisco de Asís erigidos en Cuba dejaron de ser templos religiosos hace siglos. Curioso ¿No Crees?

El primero fue el Convento de San Francisco de Asís edificado entre 1719 y 1738 en la plaza homónima de La Habana Vieja, centro histórico de la capital y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Este edificio levantado por la orden Franciscana, hace más de dos siglos y medio que dejó de funcionar como iglesia católica. En 1763, un año después de la toma de La Habana por los ingleses, fue declarado como profano por el Obispo de la urbe, porque los británicos durante la ocupación transformaron la iglesia en un templo masónico y además tuvieron la osadía de apresar al clérigo, quien en calidad de máxima autoridad eclesiástica de la villa decretó que no podría fungir como iglesia católica nunca más.

Después de ser excomulgado, del siglo XIX al XX fue Dirección General de Correos y Telégrafos, aduana del puerto y Dirección General de Comunicaciones.

La cultura cubana fue la verdadera gran beneficiaria de esta edificación, especialmente la música de cámara, porque en 1995 luego de una ardua labor restauradora llevada a cabo por la Oficina del Historiador de la Ciudad, el edificio se convirtió en una de las mejores salas de conciertos de la ciudad, la conocida como Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís y también en el Museo de Arte Sacro.

La sala de conciertos es escenario de las maravillosas interpretaciones de lo más representativo de la música de cámara, de concierto y coral, tanto de Cuba como de otras latitudes. La Camerata Romeu y el Festival de Música Antigua de La Habana radican aquí.

Por su parte, el museo atesora piezas de orfebrería, arqueológicas, pinturas de diferentes escuelas iberoamericanas, algunas de las cuales forman parte del Museo Nacional de Bellas artes, entre otros objetos. El resto de las galerías y salones son usados para exponer muestras transitorias de artistas contemporáneos tanto cubanos como extranjeros, acogen igualmente presentaciones de libros, conferencias y otros eventos relevantes.

En la parte posterior del magnífico edificio se encuentra el bello Jardín Madre Teresa de Calcuta donde puede ser admirada una estatua de la venerada santa. La sacra Catedral ortodoxa griega San Nicolás de Mira, consagrada en 2004 por su Santidad Bartolomeo I, Patriarca de Constantinopla, se halla también en los predios de esta edificación.

Y el otro Convento e Iglesia de San Francisco de Asís que tampoco funciona hoy como templo católico es el que se erigió en Trinidad, en Sancti Spíritus, también en la etapa colonial que fue edificada entre los XVIII y XIX por monjes franciscanos liderados por Fray José de la Cruz Ezpí de Valencia.

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Resulta que ya en 1826 esta construcción que un día fue levantada con el apoyo y la ayuda personal de los fieles, incluido el propio Teniente Gobernador de la villa de Trinidad, ya no funcionaba como iglesia, debido a que la orden de los franciscanos se había debilitado demasiado en el territorio.

Precisamente por esta época fue desactivada por falta de miembros y el gobierno español se apoderó de la iglesia y el convento. Por algún tiempo después de esto fue prestado el convento para realizar actividades religiosas, mientras terminaba de construirse la nueva parroquia.

Una vez que esta fue concluida, el Gobierno de España exigió la iglesia de vuelta e instaló a allí el cuartel del ejército español, uso que mantuvo hasta 1898. Más tarde, en 1902 la edificación vacía le fue entregada el gobierno de la nueva república el cual lo alquiló, nada menos que para galería.

Por esos tiempos sirvió además para escoger tabaco, fue valla de gallos y caballeriza, entre otras cosas. Sufrió serios daños en 1910 por una tormenta y, en 1926, por el grave deterioro en que se hallaba fue demolida la construcción, solo se dejó en pie la torre campanario.

Pero afortunadamente en 1930 fue reconstruido y se tuvieron en cuenta todos los elementos de la arquitectura original, luego de lo cual comenzó a funcionar aquí la Escuela Pública No.1. En 1959, luego del triunfo revolucionario y pasar a ser propiedad del gobierno que tomó el poder, se convirtió en una escuela primaria y funcionó como tal hasta 1984. En el mes de noviembre de ese mismo año se transformó en el Museo Nacional de lucha contra bandidos.

La institución mues,tra el cuerpo de milicias que creó el gobierno de Fidel Castro para eliminar los movimientos en contra de su gobierno que se habían establecido en la región del Escambray, todo un acontecimiento histórico que se prolongó por seis años desde 1960 hasta 1966.

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