El salsero dominicano José Alberto, El Canario, ha pedido disculpas por sus declaraciones sobre la poca calidad que, en su opinión personal, tiene la timba cubana. "Un día malo lo tiene cualquiera", señaló su disquera en un comunicado.
"Todos debemos reconocer, que un día malo lo tiene cualquiera. Esto se refleja en muchas manifestaciones de la vida; le sucede a los líderes políticos -de cualquier bando-, a las estrellas del deporte, y también a los artistas y músicos célebres de todas las latitudes. Conscientes de que el momento de la citada entrevista no fue el mejor para José Alberto, y de que algunas de sus respuestas no estuvieron acertadas ni acordes con su real criterio ni con el aprecio que profesa por la música cubana, queremos presentarles a ustedes, a todo el público salsero del mundo, y en especial a los seguidores de la timba cubana, nuestras más sinceras excusas por el desafortunado momento de confusión de nuestro artista", añade.
El artista intenta acallar así las críticas que le han llovido desde que se conociera que en una emisora de radio de su país cuestionó (en septiembre pasado) la calidad de la timba. Sus palabras levantaron ampollas en Cuba y en Miami a primeros de este mes y hasta Luis Marte, del staff del programa Gozando de 3 a 5, donde hizo las declaraciones, tuvo que salir en su defensa: "José Alberto, El Canario, no asaltó el cuartel Moncada", dijo.
Ahora, el artista quiere cerrar ese capítulo con unas disculpas, pero antes deja claro que le han dolido las opiniones de aquellos que consideran que ha sido "ingrato" y "desagradecido con Cuba y su música". Sus actos hablan por él, más que sus palabras, destacan desde su disquera, parafraseando la frase de José Martí: "Hacer es la mejor manera de decir".
Para demostrar lo mucho que disfruta José Alberto, El Canario, con la música cubana, ponen como ejemplo la amistad que le unió con Celia Cruz, que amadrinó la carrera del dominicano. Y no sólo eso. En sus discos habitualmente incluye temas cubanos y algunos álbumes como Back to the mambo, uno de sus trabajos preferidos, están dedicados íntegramente a Machito.
Por eso no le gustaría que la polémica opaque que él ha sido de los primeros en interpretar música cubana con temas como A romper el coco, de Irakere, Baila que baila, de los Reyes 73 o Te repetiste, de Giraldo Piloto.
Tampoco quiere que se olvide que él fue uno de los que apoyó a Isaac Delgado en Nueva York, en 1994, cuando puso su orquesta a disposición del músico cubano.
Esta relación que siempre ha tenido El Canario con Cuba y los cubanos se remonta al año 1978 cuando a nadie se le pasaba por la cabeza ir a Cuba y él estuvo en La Habana y Matanzas con la Típica 73. Ahora confiesa que esa gira, en la que conoció a Miguelito Cuní, Félix Chappottín y El Niño Rivera, ha marcado su carrera.
Quienes no le perdonan que cuestione la timba obvian la estrecha relación que mantiene el cantante con artistas como José Luis Cortés, El Tosco; Maraca, Tiburón Morales, Los Van Van, Alaín Daniel, Pancho Amat, El Niño y La Verdad, Manolito Simonet y su Trabuco, Sampling, Adalberto Álvarez, Elito Revé, Issac Delgado, Alexander Abreu, Mayito Rivera y entre otros.
Asimismo recuerda que ha grabado y actuado recientemente con el Septeto Santiaguero, con quien ganó un Grammy en 2015, y aclara que muchas de sus visitas a la Isla las hizo por la pasión que siente por la música cubana y también para apoyar a El Niño y La Verdad, una orquesta joven de timba cubana, en su lanzamiento en la Tropical.
Por si las disculpas no quedan claras, la discográfica asegura que aprenderán de lo ocurrido y que seguirán trabajando, como hasta ahora. "Lamentamos profundamente que las declaraciones de José Alberto hayan herido, involuntariamente, algunas susceptibilidades y solicitamos nos disculpen", concluyen.
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