Camila Cabello tiene unos padres luchadores. Su madre Sinuhé Estrabao, nació en Cojímar, un pequeño pueblo de pescadores al este de La Habana. Estudió arquitectura y muy joven conoció a Alejandro, un mexicano del que se enamoró perdidamente. Ambos tuvieron en la Isla a Camila.
Hasta que cumplió seis años Cabello vivió entre La Habana y Ciudad México hasta que un día su madre le dijo que darían un divertido viaje a Disney World y, después de una travesía de camión en camión, llegaron a la frontera de México con EE.UU.
Ambas se fueron a vivir a Miami a casa de un amigo cercano de la familia. Sinuhé tuvo que abandonar la arquitectura y comenzó a trabajar en un departamento de zapatos de la cadena de tiendas Marshall. Alejandro, por su parte, fregaba carros en un centro comercial de la Ciudad México para ayudar a ambas a establecerse, hasta que finalmente se les pudo unir.
“La historia de mis padres me ayuda a saber qué es lo que importa en la vida”, dijo Cabello en una entrevista a The New York Times. “Muchas veces puedes estar aquí y en Twitter, y crees que el mundo es el internet. Pero sé cómo son las cosas en los lugares de donde vienen mis padres y las batallas diarias que se viven ahí”.
La familia de Cabello logró con los años montar una compañía de construcción y años después nació la pequeña Soofía, con quien Camila disfruta muchos de sus ratos libres.
A la joven cantante le gusta rememorar su pasado en las redes sociales y compartir imágenes de su infancia. Hace poco publicó unas fotografías que su abuela le envió de cuando era pionera en Cuba y asistía uniformada a la escuela primaria.
Hemos incluido una selección de varias de esas imágenes en este breve recuento de la infancia de Cabello para que disfrutes viendo las imágenes de cuando la artista vivía en la Isla.
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