Adrián Rodolfo Vidal, un joven de origen cubano, fue detenido por la policía de Florida porque su vehículo tenía la chapa vencida, pero las autoridades se llevaron una gran sorpresa cuando inspeccionaron su camioneta y encontraron depósitos ilegales de combustible y 30 tarjetas de regalo con información robada.
A Vidal, acusado de varios crímenes, se le impuso una multa de 5 mil dólares.
El cubano transportaba 160 galones de combustible sin seguridad en dos depósitos adaptados a su vehículo, un delito que se ha vuelto común en el sur de la Florida en los últimos tiempos.
A inicios de este año la policía de Miami alertó sobre el peligro que representan estos depósitos ilegales de combustimble, luego de que a un joven de 24 años, recién llegado de Cuba a Estados Unidos, se le encontraran 250 galones dentro de su camioneta.
En ese caso el carro estaba parqueado en la Pequeña Habana y un vecino reportó un fuerte olor a gasolina. La camioneta tenía un salidero.
"Este es un problema muy, muy serio. Se trata de una bomba móvil que podría haberse desactivado a media cuadra si se hubiera detonado, o si alguien hubiera encendido un cigarrillo", dijo el comandante de la policía de Miami, Freddie Cruz en ese entonces.
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