El renacer de la frita cubana

 La verdadera frita cubana, aquella que degustaban nuestros padres y abuelos, con el sabor característico de los ingredientes y sazones nacionales, está de vuelta por la histórica Habana Vieja. Como una afrenta a las hamburguesas importadas que mucho dejan que desear al buen paladar cubano, la frita ya se confecciona y expende en la cafetería del restaurante Puerto de Sagua, ubicado en la calle Egido entre Jesús María y Acosta, a solo dos cuadras de la Estación Terminal de Trenes. Pilar López, gerente general del restaurante Puerto de Sagua, reconocida por empleados y visitantes como una de las personas más entusiastas en la confección y oferta de este plato, asegura que desde principios de junio cuando se comenzó a vender la frita, esta ha tenido una enorme aceptación y ha atraído gran afluencia de personas. La frita siempre formó parte del menú de hombres, mujeres y niños que paseaban por barrios y calles de las distintas provincias cubanas y fundamentalmente de La Habana, pues permitía resolver en poco tiempo, el desayuno, merienda, almuerzo o comida, ofertada por gran número de pequeños establecimientos que proliferaban por doquier. A finales de los años sesenta del siglo pasado, debido a la escasez de carne y otros productos, esos establecimientos comenzaron a desaparecer. La cafetería Puerto de Sagua, que cuenta con aire acondicionado, siete mesas y excelente servicio gastronómico, tiene como su Oferta Especial la frita cubana al precio de 1 cuc, acompañada de pan suave y un refresco. Los productos con los que se confecciona este popular plato son: picadillo de res, picadillo de cerdo, pimienta dulce, cebolla, ketchup y mostaza. Otra curiosidad es que contrariamente a lo que piensan algunos cubanos, las fritas originales (al igual que las ofertadas en la cafetería) van acompañadas de malanga frita a la juliana, en vez de papa frita, para que mantengan la textura y crujan al masticar. El restaurante Puerto de Sagua fue fundado en 1945 y su popularidad creció entre los habaneros por el buen trato y la calidad de sus ofertas. Los actuales trabajadores han mantenido esa tradición para disfrute de los comensales. En la cafetería también se pueden degustar sándwich de varios tipos, entre estos el especial Puerto de Sagua; arroces variados que pueden estar acompañados de pollo, jamón, camarones o mariscos, y las infaltables pizzas y espaguetis. Puerto de Sagua ha sido el pionero de este nuevo resurgir de la frita cubana y como afirma su gerente, esperemos que por doquier empiecen a pulular los establecimientos que las expendan, en aras de rescatar esta tradición bien criolla. Fuente: Opciones