Casi una veintena de venezolanos murieron congelados intentando llegar a Colombia

La directora del refugio “Hogar del Espíritu Santo de Tunja” (Boyacá, Colombia) ha indicado que recientemente al menos 17 venezolanos -entre ellos varios niños- que huían de la grave crisis económica que azota Venezuela, fallecieron por hipotermia y paros respiratorios mientras intentaban cruzar el Páramo de Berlín, en el departamento colombiano de Santander.

El páramo de Berlín es el punto más alto de la carretera entre Bucaramanga y Pamplona, a 2.800 metros de altura. Está ubicado en Colombia y se ha convertido en uno de los caminos que toman los venezolanos que han decidido abandonar su país.

Los sobrevivientes ―que han llegado con graves heridas en los pies, deshidratados y desnutridos― han explicado que enterraron a los fallecidos a la orilla de la carretera y expresan pena por aquellos que no saben que sus familiares han muerto por el camino.

Sin embargo, Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, destacó durante una intervención el pasado lunes que el flujo migratorio de Venezuela es "normal", y argumentó que aquellos que hablan de "crisis humanitaria" buscan "justificar una intervención" en ese país sudamericano.

"Ha pretendido convertirse un flujo migratorio normal en una crisis humanitaria justificadora de la intervención internacional de Venezuela. No lo vamos a permitir", destacó la funcionaria durante una conferencia prensa que ofreció junto al ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez.

No obstante, la realidad apunta a un creciente éxodo de venezolanos que intentan escapar de la crisis económica y política de Venezuela, lo que incluso ha generado dificultades con varios países vecinos como Ecuador, Colombia o Brasil.

Nicolás Maduro, en declaraciones recientes a la prensa, dijo que unos 600 mil venezolanos han salido del país en los últimos dos años, y afirmó que "más del 90 por ciento están arrepentidos".

Naciones Unidas, por su parte, ha reportado que más de unos 1,6 millones de venezolanos han abandonado Venezuela desde el 2015, el 90 % de ellos a otros países de América del Sur.