En la esquina de la calle 120 y avenida 63 de Marianao los vecinos sortean todos los días las aguas albañales que se adueñan de la zona.
La incómoda y preocupante situación, denunciada desde hace meses por los afectados, ha sido dada a conocer en la sección Buzón del periódico Trabajadores.
Problemas como este no son novedosos ni raros en Cuba; en este caso, sin embargo, se agrava por la cercanía de una escuela primaria y un salidero de agua potable que puede collevar a contaminación del agua que se consume en los hogares.
Escenas como estas se dan no solo en zonas de la capital cubana sino varios puntos de la geografía cubana.
Hace unos meses vecinos de Arroyo Naranjo denunciaban en la prensa estatal la dramática situación que viven desde hace más 10 años, con inundaciones de aguas fecales que invaden en ocasiones hasta los domicilios.
En Centro Habana, por su parte, autoridades sanitarias cubanas les recomendaron recientemente a los residentes que compraran agua en las tiendas, para no consumir la que salía por las llaves, contaminada con aguas albañales.
Datos oficiales difundidos a principios de año cifraron en 300 millones los metros cúbicos de agua que se pierden en la red doméstica de la isla.
Lo anterior, además de los conocidos problemas de cotidianidad y de salubridad que genera para los cubanos y el incremento del contagio de enfermedades, le cuesta al país 5 millones dólares anuales.
Los problemas en la red hidráulica, por otra parte, hacen que aproximadamente el 50% del agua bombeada no llegue a su destino.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: