El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel cree que es necesario buscar vías para desarrollar la empresa estatal cubana. Así lo defendió en una jornada de trabajo celebrada la semana pasada con sus ministros y viceministros.
Según recogió el diario oficialista Granma, en el encuentro se abordó además el tema del empleo y su impacto en el desarrollo del país. Los últimos datos oficiales actualizados en junio de este año arrojan que en esa fecha estaban trabajando 4,4 millones de cubanos. La mayoría (alrededor de 3 millones) están contratados por el Estado con sueldos de 30 CUC al mes y 1,3 millones, por cuentapropistas.
En 2006 había en la Isla 5 millones de personas vinculadas al mercado laboral. Eso significa que en los últimos 12 años ha desaparecido más de medio millón de empleos en el país, que pueden haberse quedado por el camino en 2010, cuando Cuba anunció el despido de 500.000 empleados del Estado. Desde entonces, según los datos oficiales, no se han creado nuevos puestos de trabajo en el país.
Ahora Díaz-Canel quiere apostar por la economía socialista, que mantiene a Cuba con libreta de abastecimiento desde el 26 de marzo 1962.
Actualmente el Turismo es el sector que más empleos genera en la Isla, mientras construcción, agricultura y educación no tienen candidatos para cubrir las vacantes. El problema está en los sueldos. En Cuba un maestro gana lo mismo que un barrendero.
El personal de Educación gana de media 533 pesos al mes (21,32 CUC). Es sólo un euro más que lo que ingresa también de media un trabajador de Servicios Comunales (532 pesos), a juzgar por las últimas cifras correspondientes a 2017, que ha publicado la Oficina Nacional de Estadísticas de Cuba (ONEI).
No es de extrañar entonces que el curso escolar haya abierto con un déficit de 170 docentes en la provincia de Matanzas. Esas vacantes han tenido que ser cubiertas por alumnos universitarios y personal contratado a tiempo parcial.
Pero Díaz-Canel cree que el problema está en la mala gestión de los Recursos Humanos. En su opinión, hay que potenciar vías de captación, contratación y atención porque en el país hay "suficientes profesionales altamente capacitados para ello".
Para economistas como el cubano Elías Amor la solución a la crisis crónica de la economía cubana pasa por una especie de Plan Marshall que traiga la democratización del país y reformas valientes hacia la protección de los derechos de propiedad, el mercado y la libre empresa.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: