Guyana se pone cada vez peor para los cubanos

En los últimos tiempos Guyana se ha convertido en un lugar donde confluyen cientos de cubanos que viajan a comprar mercancía para luego revender en la Isla. Así sucedió en su momento con Ecuador, con Rusia, o los escasos países libre de visados para cubanos.

Y tal como ha sucedido en esas ocasiones, Guyana se pone cada vez peor para los negociantes cubanos: los productos se encarecen, los servicios también, y la Aduana de Cuba no deja ser una piedra en el camino.

Carlos Martínez e Iván Quesada, dos cubanos que viajan a Guyana regularmente desde 2016, le han dicho a CubaNet que, definitivamente, no lo harán más, y emprenderán su viaje sin retorno hacia los Estados Unidos.

"Ya conocemos parte de la ruta. Nos iremos a través de Guyana y a travesaremos fronteras hasta llegar a Estados Unidos, el país de las oportunidades y la libertad”, confesaron al citado medio.

El caso es que el riesgo es mucho, y la ganancia muy poca: “Este año los oficiales de la Aduana han sido más rigurosos con los cubanos que llegamos de Guyana. Nos revisan todo el equipaje y siempre nos decomisan artículos. A mí me han quitado ropa y pares de zapatos. Un amigo que ahora viajó conmigo perdió la ganancia del viaje porque la Aduana le quitó casi 12 kilos”, dijo Martínez.

Luego de salir del aeropuerto Cheddi Jagan de Georgetown, en Guyana, los grupos de cubanos tienen redes conformadas que los llevan a las calles Regent y la avenida República, para en unas pocas horas hacer toda la compra de ropa, zapatos, champoo, ropa interior, entre otras, y apenas al otro día regresar a la Isla. En esas calles hay más de 500 centros comerciales para abastecerse.

Los habitantes de Guyana se han percatado de esta avalancha de cubanos en su país, y han aumentado los precios de la transportación, los hospedajes, la comida.

Existen cubanos que, incluso, han decidido quedarse en ese país sudamericano para trabajar, aunque los salarios sean pésimos. Esta es una muestra más de que muchas personas en Cuba prefiere emigrar a cualquier lugar, incluso en esas condiciones, antes de permanecer en la Isla.

“Esos cubanos, para mantener su puesto, malean a los que vamos a comprar. Ellos se han puesto en complot con los dueños. Le dicen cuánto valen la ropa y los zapatos en Cuba y los chinos nos suben los precios. A cambio de la información no reciben nada, no le dan ni almuerzo, ni merienda, ni nada, solo un salario miserable”, relata Iván Quesada.

De acuerdo con las declaraciones de Quesada, los cubanos en Guyana aceptan cualquier tipo de trabajo y a cambio ganan diez dólares diarios, el salario más bajo del país. “Allá con 300 dólares mensuales se vive muy mal. El alquiler más barato que encuentran los cubanos que van a trabajar es de 150 dólares. La comida es carísima. El almuerzo y la cena más barata cuestan tres dólares cada uno, y es de baja calidad. Al final quedarían unos 50 dólares para guardar, que no es nada. Allá los cubanos que se quedan a trabajar están ‘chillando goma’, pasando hambre y miseria para poder ahorrar unos centavos y venir a Cuba a ver a la familia”.

Según cifras citadas por El Nuevo Herald, entre 600 y 700 cubanos llegan cada semana a Guyana para hacer compras. En ese país se gastan entre 2.000 y 3.000 dólares, dejando así unos beneficios anuales en Guyana que rondan los 85 millones de dólares.

Guyana es, además, el país a donde los cubanos deben ir a solicitar visa estadounidense luego de que situaran allí la Embajada de Estados Unidos que antes estaba en La Habana por órdenes del gobierno de Donald Trump.