“Maduro, asesino”, “dictador”, “traidor”, fueron algunos de los tantos calificativos, a través de los cuales abuchearon al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, durante el acto de toma de posesión del nuevo presidente de México.
Nicolás Maduro formó parte de los casi 100 representantes que Andrés Manuel López Obrador reunió este primero de diciembre, como parte de su proyecto de política exterior.
La presencia del mandatario de Venezuela, en conjunto con la de la delegación estadounidense, causó un revuelo en la población mexicana. Desde hace un mes atrás, se cocinaba en Twitter una campaña en contra de su presencia en el país azteca, bajo el hashtag #MaduroNoEresBienvenido.
A las afueras del Palacio Legislativo de San Lázaro, donde se llevó a cabo la ceremonia, se concentraron una multitud de personas, las cuales se manifestaron en oposición de la llegada de Maduro en territorio mexicano.
Igualmente, dentro del recinto, recibió una serie de insultos por parte de varios legisladores de la oposición mexicana, quienes le gritaron continuamente “dictador”. El escándalo se llevó a cabo cuando Andrés Manuel López Obrador nombró al presidente venezolano en su discurso, como parte del saludo a cada uno de los jefes de estado invitados.
Mientras el nuevo presidente mexicano daba su discurso, un grupo avanzó al frente del salón y sostuvo en lo alto una manta con el mensaje "Maduro, no eres bienvenido".
Maduro no estuvo presente durante la toma de posesión, donde se realizaron los actos de repudio hacia su persona. Según informan las autoridades mexicanas, fue debido a un cambio en su hora de llegada.
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