El gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, destacó ayer lunes durante el balance anual del Ministerio de Comunicaciones que “Cuba no es un país desconectado”.
Según dijo, con los “indicadores alcanzados” al cierre del 2018, “en materia de informatización, estamos al nivel de la media del mundo”.
El pasado año, añadió, se demostró que “el proceso de informatización de la sociedad no era una simple consigna”, ello en alusión a que cada Gobierno territorial y cada Organismo de la Administración Central del Estado (OACE) dispongan de su portal electrónico.
En lo que respecta a ese ámbito, Díaz-Canel explicó que no basta con tener sitios web y plataformas interactivas, sino lograr que todas las instituciones y organismos informaticen cada uno de sus procesos, tanto los internos como los destinados a la población.
Las autoridades encargadas de ofrecer el balance anual, por su parte, se vanagloriaron de que el 90 % de los trabajadores y estudiantes vinculados al ámbito universitario disponen ya de acceso a internet.
En lo que respecta al desarrollo de la infraestructura y de los servicios públicos de las telecomunicaciones, indicaron que la conectividad institucional habría crecido en más del 21 %”, y que la telefonía móvil experimentó un crecimiento del 17 %.
Entre los objetivos alcanzados del año pasado fue citado “el creciente posicionamiento de los contenidos en defensa de la Revolución”, aunque han llamado a seguir la profundización en el uso de las redes sociales con ese fin.
Especial énfasis hicieron en “dar la batalla al enemigo que usa las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones para la subversión político-ideológica”; y en ese sentido instaron a “pensar bien el contenido que se pone en las redes”, según destaca este martes el diario Juventud Rebelde.
Entre los asuntos pendientes fue citada la necesidad de avanzar en la transición de la televisión analógica a la digital, así como en los pasos necesarios "rumbo a la tecnología celular 4G”.
Durante su intervención, con carácter conclusivo, Díaz-Canel indicó que el 2018 acabó con “el mito de Cuba como país cerrado”, y añadió que “debe haber mucha preocupación entre los enemigos de la Revolución, sobre cómo vamos a utilizar todas las redes con que contamos”.
Sobre el modo de “estar en las redes sociales”, el gobernante cubano hizo hincapié en poner los contenidos de la Revolución “de manera ponderada, inteligente, visible, sin hacerle el juego a quienes desde un lenguaje de indecencia y vulgaridad pretenden distraernos con sus provocaciones”.
Díaz-Canel considera que las Comunicaciones es una rama mucha importancia para el país, “cuyo impacto futuro será sustancial en la vida económica del país, y por consiguiente en la vida de cada ciudadano”.
El gobernante cubano se reunió en el pasado mes de octubre, durante su primer viaje oficial a Estados Unidos, con altos directivos de empresas tecnológicas estadounidenses, entre ellas Google, que firmó en ese momento cuatro preacuerdos con entidades estatales cubanas para potenciar contenidos en internet.
Aunque las tarifas continúan siendo caras para el cubano medio, el Gobierno cubano aplica desde el año 2015 una "política de informatización" con el fin de corregir el retraso tecnológico.
En el marco de esa intención ha autorizado la comercialización de internet en los hogares y amplió el número de puntos públicos de conexión wifi.
Tras grandes atrasos y problemas de todo tipo, el monopolio estatal de las telecomunicaciones, ETECSA, puso en marcha el servicio 3G en diciembre de 2018, lo que supuso que, finalmente, los cubanos que se lo puedan pagar, tienen conexión a internet a través de datos móviles.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: