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La falta de abastecimiento en las tiendas de Cuba, la mala calidad de sus productos y los altísimos y abusivos precios de venta hacen de las webs de anuncios o clasificados una alternativa cada vez más demandada por los cubanos.
Las posibilidades para conectarse a internet -vía wifi o a través de internet móvil-, pese a las muchas críticas que motivan, han influido en el uso que los cubanos hacen de estos portales para la compra venta de productos o servicios.
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Dentro de estos sitios de clasificados en Cuba Revolico es, sin dudas, uno de los más conocidos por los internautas cubanos que necesitan adquirir algún producto o contratar algún servicio.
Pero existen otros como Bachecubano, Timbirichi, Porlalivre o Cubisima con gran variedad de precios y ofertas para comprar, por ejemplo, carros o casas en Cuba, los sectores estrella de estas webs cubanas.
Los anuncios de venta de carros en Cuba así como las demandas de quienes quieren comprarlo ocupan un espacio prominente en estos sitios.
Los precios, aunque no están a la mano de cubano que vive exclusivamente de su salario pues un Lada, por ejemplo, puede costar tanto en Cubisima, Porlalivre, BacheCubano, Timbirichi como en Revolico entre 20.000 y 40.000 CUC, constituyen, sin embargo, una alternativa más viable frente a los exorbitantes precios de venta de automóviles en las tiendas del estado en Cuba, donde un Peugeot 508 hace unos escasos años podía rondar los 262 mil CUC.
Pero en estos sitios que emulan al conocido Revolico cubano también pueden adquirirse piezas de repuesto para carros: bombillos led, clanes para carros, guardafangos, reproductoras de sonidos y otros muchos accesorios para diversas marcas se encuentran incluidos también en webs como Cubisima, Porlalivre, Bachecubano o Timbirichi.
Quienes quieren poner en venta una casa en Cuba, quieren comprarla o simplemente hacer una permuta acuden a estos portales, en tanto opción más eficaz para acceder a varias ofertas, ver las fotos y comparar precios sin necesidad de perder el tiempo inicial de tener que andar visitando los inmuebles por toda la ciudad, algo más que necesario si se tiene en cuenta los grandes problemas de transporte que hay en Cuba.
Además de los buscadores de términos de estos sitios, tanto Cubisima, Porlalivre, Timbirichi como Revolico tienen en común dedicar una sección específica a la compra venta o alquiler de viviendas en Cuba.
Los precios varían en dependencia de la zona donde se ubique la casa, las características, el estado de conservación, el tamaño y los propios topes que cada vendedor quiera poner a su inmueble.
Por ejemplo, una casa de 7 habitaciones frente al canal de la Marina Hemingway en La Habana, según un anuncio publicado en Timbirichi cuesta 400.000 CUC.
Un apartamento en Centro Habana, por su parte, puede adquirirse por 10.000 CUC en Porlalivre.
Y una habitación en Playa, en la calle 74 y 23 se alquila por $15 cuc en Cubisima.
La habilitación recientemente de internet 3G en los móviles cubanos ha incidido también notablemente en la demanda de celulares en estos portales de clasificados en Cuba.
Venta de teléfonos inteligentes o tabletas así como servicios de reparación o desbloqueo de terminales pueden encontrarse también en estas webs que le hacen la competencia virtual a otros negocios de cuentapropistas como las conocidas clínicas del celular.
Que estos sitios de anuncios de clasificados en Cuba sean tan socorridos por los cubanos no es de extrañar si se compara con que casi a diario son noticia los altísimos precios con que el gobierno cubano vende sus productos en las tiendas de recaudación de divisas.
Un sofá, por ejemplo, puede costar 1.600 CUC en la tienda La Gran Piedra, de la corporación CIMEX, de Santiago de Cuba mientras que en el portal Porlalivre uno similar se puede comprar por 400.
Si a lo anterior se suma el maltrato que sufren muchos consumidores cubanos cuando acceden a la red de tiendas gubernamentales, la falta de estabilidad en el suministro y la pésima calidad, pues en ocasiones se venden hasta productos con defectos; no es de extrañar que webs como Cubisima, Timbiriche, Porlalivre o Bachecubano, junto al icónico Revolico, le hagan la competencia al mercado estatal cubano, que arrastra décadas de mal funcionamiento, paupérrifa oferta e inflados precios.
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