El gobierno de Estados Unidos ha anunciado una nueva ayuda humanitaria de 56 millones de dólares adicionales para los ciudadanos de Venezuela, después que este fin de semana el dictador Nicolás Maduro impidiera la entrada por la frontera con Colombia.
Mike Pence, vicepresidente de EE.UU., hizo el anuncio este lunes en la reunión del Grupo de Lima que se realiza en la capital colombiana, Bogotá, y cuenta con la presencia del presidente interino de Venezuela Juan Guaidó.
Tanto Estados Unidos como el Grupo de Lima reconocen desde el pasado 23 de junio a Guaidó como el representante legítimo de Venezuela y desconocen la autoridad del sucesor de Hugo Chávez.
"En las próximas semanas seguiremos entregando medicinas y alimentos", dijo Pence sobre esta nueva entrega de ayuda humanitaria del gobierno estadounidense.
El pasado sábado los simpatizantes de Maduro quemaron camiones con alimentos y medicinas para los venezolanos que sufren una dura crisis humanitaria y el sobrecoste de la vida en un país con la inflación más alta del mundo.
"Hacemos un llamado a todas las naciones del Grupo de Lima para que congelen de inmediato los activos de PDVSA. En segundo lugar, transferir la propiedad de los activos venezolanos en su país de los secuaces de Maduro al gobierno del presidente Guaidó", señaló Pence durante la reunión.
El presidente de EE.UU. Donald Trump fue el primero en reconocer a Guaidó y hasta el momento más de 40 naciones toman acciones contra Maduro para que abandone el poder de manera pacífica. Desde países afines al chavismo como Cuba califican la intervención humanitaria de "intervención disfrazada".
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