A pesar de las dificultades para llevar adelante cualquier proyecto independiente en Cuba, un grupo de jóvenes en Santa Clara -provincia del centro del país- ha impulsado una iniciativa para proteger a los animales callejeros del territorio.
Gustavo Mena, coordinador del proyecto, contó a Inter Press Service, que crearon a inicios de este año un refugio para animales que en menos de 5 meses ya ha mejorado la vida de más de 80 perros y gatos.
El grupo, que trabaja de manera voluntaria, se ocupa de rescatar a los animales que encuentran desprotegidos, los desparasitan y esterilizan, además de encontrarles dueño.
Mena relató al medio citado que el proyecto se autofinancia a través de la venta de casas para animales u otros accesorios que construyen. También cubren los gastos con sus propios ingresos o mediante ayudas que reciben de amigos en el extranjero.
“También amigos, tanto dentro como fuera del país, aportan recursos materiales y consejos sobre cómo gestionar el proyecto”, dijo.
Aunque la iniciativa es liderada por jóvenes, Mena aclaró que los integrantes son diversos. “Estamos todo tipo de personas, desde estudiantes de primaria, hasta doctores y jubiladas”, precisó.
El proyecto tiene sede en Santa Clara pero sus activistas insisten en no poner límites territoriales a sus acciones. “Operamos en cualquier lugar donde veamos caso de abandono y maltrato”, afirmó Mena.
El Refugio ha sido nombrado “Esperanza de vida y justicia”, y esperan seguir sumando a mucha más gente a cuidar de los animales.
Este grupo intenta difundir, además, información sobre el cuidado animal para concientizar a la ciudadanía de Santa Clara y al país en general, donde hay muy poco conocimiento en este sentido, en parte, debido a la ausencia de una Ley de Protección Animal.
El Gobierno cubano, incluso, no autorizó recientemente una marcha por los derechos de los animales en Santa Clara poco después de que se celebrara una en La Habana, en lo que fue un hecho sin precedentes.
El Estado no permite regularmente que se realicen manifestaciones en el país, a no ser que sean organizadas por sus propias instancias.
De hecho, el funcionario que aprobó esta noble manifestación en la capital fue expulsado de su cargo a raíz del evento, que fue ampliamente documentado por la prensa independiente y extranjera.
Pese al descuido gubernamental en relación con los animales callejeros en el país, poco a poco la ciudadanía ha ido despertando y han surgido de modo independiente varias casas de acogidas y, gracias a las redes sociales, hay también mayor difusión de ideas en este sentido desde hace algún tiempo.
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