Rosa María Payá critica a Trudeau: “Es absurdo que Cuba pueda ayudar a un cambio democrático en Venezuela”

La opositora cubana Rosa María Payá concedió una entrevista al programa La Tarde, de la cadena colombiana NTN24, en la que descartó que Cuba pueda implicarse en la búsqueda de una solución a la actual crisis venezolana, algo que consideró “un absurdo”.

La afirmación de Payá está relacionada con la propuesta formulada por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, al vicepresidente norteamericano Mike Pence, de involucrar a La Habana en el proceso para un retorno de la democracia al país sudamericano.

“Es un absurdo que el presidente de una democracia tan respetable como Canadá se atreva a proponer un argumento como el de que el régimen castrista, que lleva en el poder 60 años, pueda tener alguna influencia positiva en la democracia en Venezuela, sobre todo cuando estamos hablando de un país altamente infiltrado por el régimen cubano”, afirmó.

Para la joven activista, no tiene sentido darle ese papel a Cuba, cuando este país se dedicó a difundir el fracasado modelo del socialismo del siglo XXI en varios países del área latinoamericana, a través de una enorme red de injerencia y del denominado Foro de Sao Paulo, que agrupaba a los movimientos sociales y de izquierda del continente.

“Que [los canadienses] se atrevan a decir a estas alturas que ese régimen puede tener alguna influencia positiva en un cambio democrático en Venezuela es una falta de respeto a la inteligencia del pueblo venezolano, y en el aspecto moral es una falta de respeto al pueblo cubano”, añadió.

A la pregunta de por qué Canadá, tan solidaria con los venezolanos y con el presidente interino Juan Guaidó, puede pensar en darle ese rol a Cuba, Payá precisó que carece de toda lógica elemental, pues el colapso de Venezuela es una derivación de la intromisión cubana.

Pensar siquiera en atribuirle a Cuba la posibilidad de desempeñar algún papel constructivo en la crisis venezolana, “responde a la influencia maligna que tiene el régimen cubano en el resto del mundo”.

Sobre la crisis económica en Cuba, señaló que “estamos a las puertas de la crisis humanitaria. Los cubanos no tienen que comer ya, a día de hoy, y la semana pasada era un escándalo que por la libreta de racionamiento les permitían comprar un solo pescado para una familia de tres, al mes, y a un precio que muchos cubanos no pueden pagar”.

“Hay que separar –dijo– la manera en que sobrevive el régimen, de la manera en que sobrevive el pueblo. El pueblo ha estado pasando hambre y necesidades por 60 años; por períodos ha estado enfermándose por hambre”.