El ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, se refirió a las más recientes sanciones estadounidenses contra la Isla como un mecanismo para "dañar el nivel de vida de los cubanos" y "asfixiar la economía".
"Rechazo enérgicamente el anuncio de EE.UU de nuevas sanciones contra Cuba que restringen los viajes de estadounidenses y endurecen el bloqueo (embargo)", escribió en su cuenta de Twitter.
"Pretenden asfixiar la economía y dañar el nivel de vida de los cubanos para arrancarnos concesiones políticas. Fracasarán otra vez", concluyó.
Este jueves la administración de Donald Trump anunció que a partir de este 5 de junio EE.UU prohibirá que los cruceros, las embarcaciones de recreo y los aviones privados viajen a la nación caribeña.
"Estados Unidos no permitirá las visitas a la Isla a través de embarcaciones de pasajeros y recreativas, incluidos cruceros y yates, así como aviones privados y corporativos", recoge el comunicado del Departamento de Estado.
Según dijeron, estas medidas están dirigidas al turismo que "tiene fuertes lazos económicos con los sectores de seguridad, militares e inteligencia cubanos en Cuba".
Como parte de las medidas se reestringirán además los viajes culturales y educativos (people-to-people) de estadounidenses a Cuba.
Luego del anuncio, el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel también había publicado un mensaje en su cuenta de Twitter en el que aseguraba "Cuba no se dejará amedrentar ni distraer con nuevas amenazas y restricciones".
"No han podido asfixiarnos. No podrán detenernos", agregó.
La cúpula del poder cubano ha ignorado en sus mensajes que Cuba atraviesa una fuerte crisis en su economía, algo que ellos mismos han reconocido en anteriores ocasiones.
Los cubanos llevan décadas sufriendo la escasez de alimentos, las malas condiciones de la vivienda y el transporte, entre otros muchos problemas y en los últimos meses estos se han agudizado.
El Gobierno ha achacado siempre la culpa al embargo estadounidense. Y ahora, convencidos -tanto Díaz-Canel como Bruno- de que EE.UU no podrá "asfixiar" a la Isla, la respuesta del ministro de Exteriores a Trump es que "pretende "dañar el nivel de vida" de los cubanos.
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