El slugger cubano Jorge Soler ha sido una de las historias más asombrosas de la armada antillana en las Grandes Ligas durante la presente temporada.
A sus 27 años ha logrado superar la barrera de los 40 cuadrangulares y las 100 impulsadas. Actualmente Soler batea .251, 40 jonrones y 101 impulsadas.
Él también se convirtió en el primer beisbolista nacido en la isla que participa en Series Nacionales y conecta 40 o más cuadrangulares en una campaña de Grandes Ligas.
"Me siento muy orgulloso de haberlo logrado. Fue especial para mí y mi familia pues se lo merecen también", dijo Soler a CiberCuba este viernes en el Marlins Park.
Los Reales de Kansas City sumidos en una temporada perdedora y de reconstrucción pueden vanagloriarse de poseer a Soler, quien llegó con un halo de promesa luego del cambio por Wade Davis a Chicago y que puso a Soler en Kansas. Ya en 2018 se esperaba la consagración del de quien fuera uno de los más valorados prospectos de su clase, pero una lesión acabó con las esperanzas.
"Cuando rompí el récord allá en Kansas City sentí una emoción tan grande que no me lo creía", dice sobre la noche que quebró la marca de 38 bambinazos de Mike Moustakas, récord de la franquicia.
Soler aún recuerda sus comienzos en la Serie Nacional de Cuba y un debut complicado en Sancti Spiritus, partido que trasmitió la televisión. Tiempo después emigró y firmó un contrato profesional con Chicago Cubs.
Ahora en Kansas el futuro parece no tener horizontes para el cubano.
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