El presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo este miércoles que el coronavirus no era un rival para los estadounidenses.
“Quiero que todos los estadounidenses entiendan: estamos en guerra con un enemigo invisible, pero ese enemigo no es rival para el espíritu y la resolución del pueblo estadounidense”, expresó en su cuenta de Twitter.
“No puede superar la dedicación de nuestros médicos, enfermeras y científicos, y no puede vencer el AMOR, EL PATRIOTISMO y LA DETERMINACIÓN de nuestros ciudadanos. Fuertes y unidos, ¡PREVALECEREMOS!”, añadió en otro texto en la plataforma.
Ante el impacto de pandemia en Estados Unidos, Trump anunció este miércoles que invocaría una ley federal de producción de emergencia para garantizar el abastecimiento de máscaras protectoras y suministros médicos en el país.
Asimismo, aseguró que pondría en vigor la Ley de Producción de Defensa, que permite nuclear al sector privado en respuesta a situaciones extremas para la nación, posibilitando así incrementar la producción de máscaras, ventiladores y respiradores, y ampliar capacidad de los hospitales para enfrentar la batalla sanitaria contra el coronavirus.
El coronavirus ha infectado a más de 200.000 personas en todo el mundo y los muertos superan los 8.700, provocando confinamientos que no se vivían desde tiempos de la Segunda Guerra Mundial.
Algunos incluso comparan la situación con la Gran Depresión de la década de 1930.
En Estados Unidos, el COVID19 se ha cobrado la vida de 608 personas, además de provocar más de seis mil contagios.
La enfermedad se originó en China, más específicamente en la localidad de Wuhan. En ese país, el brote ha causado tres mil 241 muertes, pero en la actualidad la mayoría de los casos confirmados ya están fuera de la nación asiática.
Recientemente, el Ministerio de Defensa chino aseguró haber desarrollado "con éxito" una vacuna contra el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
Estados Unidos aplicó la primera vacuna experimental contra el coronavirus este lunes en el brazo de una voluntaria saludable, según el Instituto Nacional de la Salud de Estados Unidos (NIH).
Semanas antes, Trump anunció que se reuniría con representantes de la industria farmacéutica, a quienes ya ha pedido que aceleraran la búsqueda de una vacuna.
Sin embargo, la gestión de la actual administración de Washington no ha estado exenta de señalamientos. La prensa oficialista cubana la emprendió en contra de la administración de Trump, responsabilizando directamente al mandatario estadounidense de las muertes por COVID-19 en la nación norteamericana.
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