Del balance informativo sobre el coronavirus que han dado hace unas horas las autoridades españolas, tras haber prorrogado el estado de alarma hasta el 12 de abril, sobresale la cifra de 9.444 sanitarios infectados.
Según las estadísticas más recientes, médicos y enfermeras suman ya un 14,7% del total de contagiados en la península; es decir, que cada hora más de 60 profesionales de la salud dan positivo al virus. Con estos números, España es ya el país con un mayor porcentaje de afectados en el sector, como reconoció el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
Sin el material de protección adecuado, y sin todas las medidas de seguridad, con jornadas de trabajo maratonianas y expuestos al riesgo por su contacto diario con los enfermos, el personal sanitario está sufriendo la pandemia a un ritmo que no es comparable con el de otros países afectados por la pandemia.
Según el diario El País, los datos de profesionales contagiados y en aislamiento que la Consejería de Sanidad de Madrid ha cifrado en 2.600, están bastante lejanos de la real incidencia de la pandemia en las plantillas. Este viernes, una recopilación de Comisiones Obreras del Summa y 14 centros hospitalarios de Madrid (de los más de 600 centros en total), sumaba 3.439 profesionales de baja.
Esta situación ha obligado al gobierno español a agilizar los trámites para que alrededor de 200 profesionales sanitarios extranjeros residentes en el país consigan la autorización para ejercer en España y se incorporen, en los próximos días, al Sistema Nacional de Salud (SNS) para hacer frente a la epidemia de COVID-19.
Así lo han comunicado este viernes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el de Universidades, el de Sanidad y el de Política Territorial y Función pública, que han puesto en marcha una acción coordinada para incrementar el número de profesionales sanitarios extranjeros en disposición de trabajar en España "con carácter inmediato".
Esta medida podría beneficiar a los médicos cubanos que residen en España, y que la semana pasada se ofrecieron a aportar sus conocimientos frente al avance de la epidemia.
En aquel momento, Salvador Illa, ministro español de Sanidad, anunció la contratación de personal sanitario con un título de especialista reconocido fuera de la Unión Europea, pero la limitó a quienes "hayan sido evaluados positivamente por el Comité de evaluación o que hayan superado la parte teórica de las pruebas teórico-prácticas reguladas en el Real Decreto 459/2010". La mayoría de los médicos cubanos que propusieron su ayuda a las autoridades españolas están aún en proceso de homologación de su título. Hay también algunos con la homologación y años de experiencia, pero sin permiso de trabajo.
Ahora el Gobierno español calcula que alrededor de 200 médicos y enfermeros de terceros países, residentes en la península, podrán incorporarse en los próximos días al sistema sanitario.
Para ello, desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se han impulsado los mecanismos de agilización administrativa previstos en el Procedimiento Administrativo Común, que permiten priorizar los expedientes administrativos de autorización de residencia y trabajo que afectan a trabajadores de un sector esencial ante la emergencia sanitaria. Así, se ha dado prioridad a los permisos de residencia y trabajo, homologado títulos y reconocido competencias profesionales "para dar una respuesta inmediata en un momento de máxima exigencia y alta demanda de estos perfiles en nuestro mercado laboral".
También se ha elaborado un protocolo de coordinación entre el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el de Universidades y el de Sanidad que permite un intercambio de información, consulta y resolución efectiva para la puesta en marcha de la medida.
Por su parte, el Ministerio español de Universidades, ha resuelto desde el pasado viernes un total de 100 expedientes de homologación de títulos de médicos y, en lo que va de año, suma 762 profesionales homologados en el ámbito sanitario.
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