Yomil pide una mujer que le arregle los zapatos en Instagram y Eliécer Ávila rememora a Camila Acosta en Facebook al referirse a la publicación del reguetonero. Las redes sociales de los cubanos comienzan a mover debates profundos a partir de contenidos ligeros.
El joven político cubano Eliecer Ávila comentó en su perfil de Facebook que sería bonito una Cuba en que un reguetonero y una activista por los derechos humanos puedan empujar juntos la sociedad.
“Muchas Cubas dentro de la misma Cuba: Camila Acosta, joven cubana que habla de la realidad del pueblo, desalojada, multada y sobreviviendo con lo mínimo. Yomil, que no habla de política, con 50 mil horas de menos estudios, no encuentra cómo organizar su autorizada “fortuna”, publicó Eliécer.
El comentario de Eliécer se originó como reacción a una foto compartida por el reguetonero cubano Yomil, en la que pide una pretendiente que le organice los zapatos, mientras se muestra en medio de un armario repleto de zapatillas deportivas y ropa.
Pese a lo machista de la publicación de Yomil, no le faltan propuestas de féminas que se ofrecen incluso para ser su camarera personal. También recibió alguna invitación a donar ropa y zapatos. “Mi abure (hermano en yoruba) por qué no donas algo de eso. Demasiado”, le dijo un usuario.
Sin embargo, la reflexión de Eliécer al respecto tomó un curso longitudinal. No entró directamente en el conflicto machista, sino que contrapuso dos imágenes y colocó un nuevo tema en el discurso: los disidentes cubanos tienen menos recursos que un reguetonero.
Este simple enunciado responde a una de las acusaciones más frecuentes que reciben quienes se oponen al gobierno cubano, pues el Estado dice que son financiados por la CIA, USAID y otras organizaciones anticastristas.
Eliécer no usó cualquier personaje en la disidencia, eligió a Camila Acosta, una mujer, joven, inteligente que lucha por hacer valer su criterio y su posición ante los conflictos cotidianos de la vida en Cuba y que además lo hace desde una posición de vulnerabilidad económica.
“Que lindo sería ver a Yomil junto a Camila, empujando juntos, para que todos los cubanos podamos al menos tener lo indispensable, respeto, derechos, trabajo y dignidad. No pierdo las esperanzas”, aseguró Ávila.
Sin embargo, los lectores llevaron el polémico post de Eliécer a uno y otro lado según sus criterios. Uno de los más interesantes es una pregunta retórica: ¿Se puede triunfar en Cuba estudiando?
Otro tema que salió a la palestra es el discurso manido de los músicos que se reúsan a hablar de política. Sin embargo, navegan entre ambas posturas, salen invictos, se enriquecen y todo lo consiguen cubiertos por el manto de la cultura y de la unidad de los cubanos.
Eliécer quizás con astucia, quizás con la tan criticada inocencia que le caracteriza, logró sutilmente abrir un pequeño debate en sus redes sobre la realidad cubana, una de sus pasiones que al parecer comienza a aprender a desarrollar cada vez mejor.
Por su parte, Yomil también logró entrar en el debate, en un círculo de cubanos en el que no es nada habitual que se le mencione. Quizás incluso le surjan nuevos fanáticos.
De quién poco se sabe qué beneficio pueda sacar de todo este rifirrafe en Facebook es de Camila Acosta. La joven periodista independiente recibió hace poco una multa de 3 mil pesos cubanos por sus publicaciones en la conocida red social.
La policía política le acusó de incumplir el Decreto 370 del Código Penal de Cuba que según ella misma declara le informaron que se refiere a: “difundir, a través de las redes públicas de transmisión de datos, información contraria al interés social, la moral, las buenas costumbres y la integridad de las personas”.
Si en algo Eliécer lleva razón dentro de todo este debate, es en las diferencias en el tratamiento de la figura femenina en las redes sociales, especialmente para las mujeres que hablan de política.
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