Las autoridades sanitarias de Cuba anunciaron que varios de los medicamentos de mayor demanda en la isla no estarán disponibles para la población en los próximos meses.
Luis Armando Alarcón Camejo, director general de la Empresa de Laboratorios MEDSOL, reveló a la televisión nacional que debido a la ausencia de una pieza de repuesto en la fábrica, en este momento no se está produciendo toda la cantidad suficiente de enalapril, el cual se emplea en los tratamientos contra la hipertensión.
“No tenemos la posibilidad de producir el metronidazol (antiparasitario) en tabletas, ni el cotrimoxazol (antibiótico) en tabletas, ni la metildopa (antihipertensivo)”, admitió.
“El clordiazepóxido (ansiolítico), que no es un medicamento de prioridad uno ni de tarjeta, pero es muy demandado por la población, también se va a ver afectado en los meses de julio y agosto”, añadió.
Según el funcionario, a partir de agosto debe estabilizarse la distribución de salbutamol, un fármaco que en los últimos meses ha escaseado en las farmacias de todo el país a causa de la falta del gas acompañante necesario para su elaboración.
El salbutamol, que se vende de forma regulada por el llamado tarjetón, se emplea para el tratamiento del asma, una enfermedad que padece más del 13 por ciento de la población en la isla.
Por otra parte, en el presente mes debe aumentar la presencia de la metformina, una medicina que requieren los pacientes diabéticos.
Alarcón Camejo achacó al embargo comercial de Estados Unidos la escasez de medicamentos, que si bien se ha agudizado en los últimos meses, la ciudadanía la viene sufriendo desde hace años.
“También ha estado el efecto de la pandemia de coronavirus, la logística en cuanto al transporte aéreo y marítimo prácticamente se ha detenido”, precisó.
La falta de medicinas en el país es tal que el régimen ha comenzado a instruir a los médicos en el uso de la medicina natural y tradicional para tratar de sustituir a los fármacos convencionales.
Un doctor de Santiago de Cuba reveló a CiberCuba que a él y a sus compañeros se les orientó actualizar los conocimientos de los profesionales que laboran en el nivel primario de salud, “pues se hace necesario enfrentar la enorme escasez que hay hoy en las farmacias”.
“Ahora mismo, por ejemplo, se hace notoria la falta de fármacos para tratar enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, el asma y la diabetes, pero tampoco encuentras dipirona hace semanas, con el dengue golpeando, y no hay antibióticos de ningún tipo”.
Según un reciente estudio realizado por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), el 83 por ciento de los ciudadanos que necesitan medicamentos no pueden adquirirlos en la red de farmacias y deben optar por tratar de conseguirlos en el mercado negro.
El sector más afectado de la población son las personas de la tercera edad. Del total de ancianos entrevistados, la mayoría dijo que se sienten golpeados por la escasez tanto de alimentos como de medicinas, productos a los que tienen un difícil acceso debido a que la jubilación mínima actual es de menos de diez dólares mensuales.
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