A 50 ascendió el número de casos positivos de coronavirus detectados en el municipio Bauta, en Artemisa, derivados de un evento de transmisión local dado a conocer el pasado 22 de julio.
Las autoridades sanitarias no descartan la confirmación de nuevos pacientes, por lo que el Consejo de Defensa Provincial (CDP) de Artemisa dictó el miércoles nuevas medidas de restricción a la población del territorio.
La entidad extendió la cuarentena obligatoria al poblado de Playa Baracoa, situado al oeste de La Habana, que el día anterior confirmó 12 infectados por el evento de transmisión de Bauta.
Con la medida se espera eliminar la salida y entrada de personas del citado pueblo. Desde el domingo se habían aplicado restricciones de movimientos a los habitantes del poblado de Bentré.
Ricardo Concepción Rodríguez, vicepresidente del CDP, expresó en una publicación en su muro de Facebook que la situación actual del municipio Bauta “ha obligado a los integrantes del Consejo de Defensa Provincial, a tomar medidas en función de proteger primero que todo, la salud del pueblo”.
“Se orienta el empleo obligatorio del nasobuco por parte de todos los habitantes de los once municipios de la provincia, así como el cierre de todos los bares, y el cierre de las playas de Caimito y Bauta. Además, el consejo popular Baracoa entra en cuarentena”, precisó.
“Muchos casos asintomáticos, lo cual denota también un incremento del riesgo y por tanto que las personas se mantengan en sus hogares”, añadió.
En toda la costa norte de Artemisa las autoridades acordaron cerrar las playas, para evitar que las personas de Bauta se desplazaran a las de otros municipios.
Por su parte el primer ministro Manuel Marrero expresó que una vez sobrepasados los 10 casos de COVID-19 ya se considera un evento de transmisión local, lo cual obliga a aplicar de manera inmediata la cuarentena general.
Pese a estos reportes de nuevos casos, la provincia continúa en la tercera fase de vuelta a la normalidad, aunque de acuerdo con la evolución del evento de Bauta, el gobierno podría adoptar disposiciones que reviertan esa situación.
El pasado 23 de julio el CDP de Artemisa declaró en cuarentena el casco urbano de Bauta, tras registrar los primeros 12 casos de COVID-19 del evento de transmisión local, entre los cuales había dos niños de nueve y cinco años de edad.
Según declaró José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, el brote “parte de un caso de una persona de 53 años, ama de casa, que efectuó una fiesta en su casa, donde asistieron varias personas que también viajan con frecuencia a La Habana. Hasta el momento habían identificado a 24 personas que participaron en esa fiesta y lo otro es que ha tenido casos que son contacto de (Playa) Baracoa, Artemisa, Alquízar y Guanajay”.
A partir de entonces quedaron en aislamiento 28 559 habitantes de la zona más céntrica de Bauta, residentes en 237 manzanas y la parte comercial, ubicadas en los consejos populares urbanos I y II, del área de salud “Pedro Esperón, detalló el portal web oficialista Cubadebate.
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