Casi tres años después de la masacre en el Strip de la compañía de casinos MGM Resorts International, en Las Vegas, un juez aprobó pagos por un valor total de $800 millones de dólares para las víctimas.
La indemnización, que proviene de las aseguradoras de MGM, será repartido en más de 4400 familiares y víctimas del tiroteo, en el que fueron asesinadas 58 personas y 850 resultaron heridas.
Robert Eglet, el abogado de los demandantes que lleva un año afinando los detalles del acuerdo, dijo que las cantidades las determinarán dos jueces jubilados y que los pagos podrían comenzar a realizarse a finales de año.
MGM Resorts, propietario del Mandalay Bay, pagará $49 millones, y sus compañías de seguros pondrán los restantes $751 millones.
La jueza del Tribunal de Distrito del Condado de Clark, Linda Bell, en una breve orden, destacó la "participación casi unánime en el acuerdo entre los posibles reclamantes".
La masacre en Las Vegas ocurrió el 1ro de octubre de 2017, cerca del hotel y casino Mandalay Bay, donde se realizaba al aire libre el festival de música country Route 91 Harvest con más de 22 000 personas.
En medio del evento, Stephen Paddock disparó en repetidas ocasiones desde las ventanas del piso 32 del Mandalay Bay.
Paddock poseía al menos 19 armas (automáticas y semiautomáticas) en la habitación del Mandalay en la que perpetró el ataque, y un total de 47 armas con las que se encontraron en sus casas en Mesquite y Reno, Nevada, adquiridas en cuatro estados diferentes.
El trágico tiroteo está catalogado como uno de los más graves que se han producido en territorio estadounidense en los últimos años, junto al ocurrido en 2016 en el club gay Pulse de Orlando, en Florida, donde fueron asesinadas 49 personas y el autor de la matanza, un estadounidense de origen afgano, quien fue abatido por la policía.
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