Un jonrón de Carlos Correa dejó al campo a los Rays y puso a Houston a un solo triunfo de remontar la desventaja de 3-0 que exhibía la pulseada entre ambos equipos tras el primer trío de encuentros.
El batazo del torpedero boricua (a costa del perdedor Nick Anderson) decretó el final del choque con score de 4x3, con triunfo para el relevista Ryan Pressly.
La alineación de Tampa conectó un total de tres jonrones con bases limpias, uno de ellos con la firma del cubano Randy Arozarena, quien le pegó su bambinazo a una recta (96.6 mph) de Enoli Paredes y la hizo viajar un estimado de 406 pies por el right-center.
Dicho golpeo, su sexto de esta fase, lo empató en la cima de esa clase de conexiones para novatos en postemporadas, una marca que ahora comparte con otro jugador de los Rays, Evan Longoria, quien la había fijado en 2008.
Por cierto, los hombres que más cuadrangulares han logrado en estas instancias durante un solo curso están igualados a ocho y son Barry Bonds (Gigantes, 2002), Carlos Beltrán (Astros, 2004) y Nelson Cruz (Rangers, 2011).
El duelo empezó con los Astros arriba por cuadrangular de George Springer en el primer capítulo, y luego del momentáneo empate derivado del vuelacercas de Brandon Lowe, un hit de Michael Brantley puso el choque 3x1 a favor de los de Houston.
Tampa descontaría más tarde por otro cuadrangular (el ya referido de Arozarena), y niveló la pizarra en el octavo cuando Ji-Man Choi haló para su mano un envío del supersónico Josh James. De ese modo quedó la escena lista para el walk-off homerun de Correa.
Mañana tendrá lugar el sexto choque del dual meet, donde Houston intentará forzar el séptimo y definitivo de la serie.
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