El sector del Comercio y la Gastronomía de La Habana ha anunciado ofertas alimenticias para fin de año en la capital, aunque "todavía muy lejos de las posibilidades de satisfacer las necesidades de la población", según reconoció Julio Martínez, coordinador de programas del Gobierno provincial.
La oferta incluye redes para la venta de productos que no se veían desde hace mucho en las tiendas, como cerdo, embutidos y pescado congelado.
Lo que se presenta como una "acción coordinada de organismos, ministerios, empresas productoras y las autoridades de la ciudad" incluye una lista de lugares (unas 80 unidades para el cerdo, unas 40 con derivados cárnicos y otras 39 para pescado), que comercializarán entre el 20 y el 31 de diciembre, de forma liberada, pero controlada, con la anotación en la libreta de abastecimiento y presentación del carnet de identidad, los productos anunciados.
La idea, precisan las autoridades, es que cada núcleo familiar compre una sola vez, "para evitar acaparamiento y propiciar que estos alimentos lleguen a la mayor cantidad de núcleos posible".
La red funcionará en los horarios de 9:00 a.m. a 6:00 p.m. De acuerdo con Martínez, en el caso del cerdo, la venta será por piezas (lomo, paleta, pierna y costilla), mientras que en el caso del pescado se venderá por unidad y libras, en dependencia de la especie y el tamaño, para evitar picarlo.
Según sostuvo Martínez, “tenemos también un nivel de cerveza –envasada y dispensada– en los restaurantes, así como en mercados de la cadena Ideal, aunque distante de la demanda, mientras que las confituras se han reservado para los parques infantiles.
Como parte de las propuestas de la Empresa Restaurantes Habana, las familias habaneras también podrán reservar comida para llevar a casa en restaurantes como el Mandarín (arroz frito especial), el Yang-Tsé (arroz frito especial y otros platos de la cocina china), el Pío pío de la calle L (pollo frito, por onzas), Rancho Luna (pollo entero asado y relleno), Siete Mares (paella especial Siete Mares), El Conejito (conejo entero asado al jugo), y La Ostionera (paella especial Ostionera).
Existen diferentes modalidades para acceder a las propuestas gastronómicas. En algunas unidades se podrá tanto disfrutar de las cenas como llevar a casa, reservar cerdos mamones e incluso, reservar a domicilio.
Un total de 25 instalaciones brindarán cenas y otras opciones: El Cochinito (cerdo mamón), Siete Mares y Ostionera (llevar), Castillo Jagua, Club 21, Monseigneur y El Conejito (carnero), Rancho Luna, Mandarín, Caribeño (cerdo mamón, pavo en la unidad y carnero), El Bosque, El Encanto y Mónaco (cerdo mamón y pizza familiar), El Jardín (cerdo mamón, pavo y a domicilio, por el 7831-1414 ), Yang Tsé, Las Bulerías, Emperador, Hurón Azul, Ranchón Santa Fe (7290-7511) y Rancho Giraldilla (7879-3537, cerdo mamón, pavo en la unidad, carnero y a domicilio), Montecattini, Doña Rossina y La Romanita (pizza familiar) y Trastevere (cerdo mamón).
La Empresa Provincial de Alojamiento (EPA), también anunció que pondrá a disposición de la población siete instalaciones con fines recreativos: villas Libertad, Cristal, Cocal y Chicola, Casa Maravilla y Aparthotel Lupe.
Esas instalaciones se sumarán el resto de los alojamientos de la empresa para la realización de cenas, tanto para consumir como para llevar, incluidos cerdos mamones, con varios tipos de completas que incluyen entrantes, ensaladas, arroz, frijoles, plato fuerte (pollo, res y cerdo), vianda, postre y líquidos, entre otros. Esa red está integrada por Villa Carmen, hoteles Celestes, Ligerito, Centro, las casas Los Pinos y La Vía, los restaurantes El Colonial y Ranchito, las cafeterías La Caleta y El Recreo, La Palma y el complejo Río Cristal.
La Empresa Provincial de Recreatur también anunció programas para "una recreación sana que abarque varios segmentos de la población y sus diferentes edades", con la gastronomía como complemento de los servicios recreativos.
Con 35 instalaciones agrupadas por servicios especializados, brindará cenas de menús por fin de año los días 24, 25 y 31 de diciembre para llevar y por reservación (con cerdo, pavo y pollo asados), en diferentes establecimientos.
En los Parques Infantiles se realizarán actividades recreativas, con proyectos comunitarios de los territorios, magos, payasos; el Parque Isla del Coco y todos los Complejos Recreativos tendrán actividades culturales, infantiles y para adultos con grupos de pequeños y grandes formatos.
Además, en el Parque Lenin se pondrán a disposición de la población 11 unidades que brindarán variadas ofertas de pollo, cerdo y res, en diferentes modalidades. Los restaurantes del lugar tendrán otras ofertas.
En los 15 municipios de la ciudad también habrá ofertas de cenas en restaurantes y para llevar en una red de 70 unidades, para disfrutar más cerca de casa.
Una red de 25 establecimientos brindará pizzas familiares.
Las ventas de la ansiada carne de cerdo se han distribuido por unidades de la red de Comercio de los diferentes consejos populares, aunque varios usuarios se quejan de que sus consejos no han sido incluidos en la lista.
También se han habilitado diferentes puntos en la capital para la venta de carnes en conserva y pescado congelado.
Por su parte, en la Red de Mercados Ideales, aseguraron las autoridades locales, se comercializarán bebidas, refrescos, algunas confituras y cestas por fin de año.
La información gubernamental recuerda que, por la situación epidemiológica derivada de la COVID-19, se hace imprescindible mantener las medidas higiénico-sanitarias dirigidas a la población y los trabajadores.
A pesar de la larga lista que acompaña el anuncio gubernamental, todo parece indicar que la demanda de alimentos (algunos a precios altísimos) supera con mucho la oferta.
En las redes sociales, varios cubanos mencionaron listas interminables para los nuevos productos.
"Me voy a apuntar en la lista que hay por ahí para comprar carne de puerco en la feria del día 29. Va por el 5021, si falla alguien tengo posibilidades", escribió, por ejemplo, alguien que firma como "Francisnet Díaz".
En cuanto a los cubanos residentes en otras provincias parece que tendrán menos suerte: muchos santiagueros, por ejemplo, se apresuraban el mes pasado a comprar el cerdo para la tradicional cena del último día del año, porque temían que la incontrolable escalada de precios elevara el costo de esa carne a niveles inasequibles.
En Villa Clara, por otra parte, hasta los medios oficiales han definido la oferta de los mercados como "anémica".
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