El expresidente republicano de EE.UU, George W. Bush, denunció a los manifestantes que irrumpieron en el Capitolio este miércoles y a los políticos que “los incitaron”.
En un comunicado oficial a través de la red social Twitter, el ex mandatario califica los disturbios civiles en la sede de las dos cámaras del Congreso de Estados Unidos como una insurrección.
"Así es como los resultados de una elección son disputados en una república bananera, no en nuestra reública democrática", dijo.
Sobre la historia de verdaderos procesos democráticos que precede a Estados Unidos, y los eventos sin precedentes de este 6 de enero, el ex mandatario refirió:
"Estoy consternado por el comportamiento imprudente de algunos líderes políticos desde las elecciones y por la falta de respeto mostrada hoy hacia nuestras instituciones, nuestras tradiciones y nuestra aplicación de la ley".
Aunque Bush no mencionó a nadie específicamente dijo que la gente que atacó el Capitolio fue “instigada con falsedades y falsas esperanzas”.
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