Una embarazada cubana de 19 años sin antecedentes patológicos se encuentra grave por coronavirus, según se informó este domingo en el parte de incidencias de la enfermedad del Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
La joven tiene 21,6 semanas de gestación y reside en el municipio Caimanera, en Guantánamo.
Se encuentra en cuidados intensivos y hasta el momento no presenta fiebre, ventila espontáneamente, tiene buen ritmo diurético y está hemodinámicamente estable. La gasometría muestra parámetros normales y los rayos X del tórax no arrojaron lesiones pleuropulmonares.
Ella no es la única paciente menor de 20 años reportada de grave en Cuba. Un joven de 19 años del municipio Guisa, en Granma, también está en esta condición.
De acuerdo con el parte médico, el paciente posee antecedentes de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y de cardiopatía isquémica.
Al igual que la embarazada de Guantánamo, el joven granmense permanece en cuidados intensivos, sin fiebre y ventilando espontáneamente, con buen ritmo diurético y estable hemodinámicamente.
Sin embargo, la gasometría mostró acidosis respiratoria y los rayos X del tórax revelaron elementos de atrapamiento de aire, fibroenfisema pulmonar y congestión pulmonar.
Según la información de las autoridades sanitarias de este domingo, en este momento hay 70 enfermos con coronavirus en las salas de terapia intensiva de Cuba: 37 críticos y 33 graves.
Además de los dos jóvenes, entre los pacientes críticos hay un mujer de 37 años de La Habana y un hombre de 35 años de Villa Clara.
Asimismo, en el grupo de enfermos graves hay una mujer de 37 años de Cárdenas, en Matanzas.
Durante el pasado mes de enero, 120 embarazadas dieron positivo al coronavirus en Cuba, una cantidad superior a las 110 gestantes y recién paridas que se diagnosticaron con el virus desde marzo a diciembre de 2020.
Los expertos opinan que este grupo de población es más proclive a a contagiarse y a desarrollar formas graves de la enfermedad, lo cual incrementa las probabilidades de tener un parto prematuro que perjudica al bebé, quien nada más nacer debe ser ingresado en unidades de cuidados neonatales.
Según explicó Mercedes Piloto, especialista del programa materno infantil del MINSAP, ello se debe a las modificaciones que ocurren en la anatomía y la fisiología de la mujer que está embarazada.
"Por ejemplo, el sistema inmune, el encargado de las defensas, tiene disminuida su actividad. Y en el aparato respiratorio, igualmente, la función respiratoria sufre cambios, de ahí a que sean más vulnerables", detalló.
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