La artista y activista cubana Tania Bruguera señaló que el Noticiero Nacional de Televisión (NTV) estaba claramente vinculado a una respuesta gubernamental contra las voces disidentes de la isla y añadió que, en esa línea, incurrían en violaciones a la legalidad.
“Cuando ya no le quedan recursos legales, solo les queda la represión pura y dura, sin máscaras. Y lo que están haciendo el noticiero son las últimas pataletas de un gobierno al que ya nadie le cree”, afirmó Bruguera durante una entrevista este viernes con el actor, humorista y conductor Alexis Valdés.
“Ellos han caído en la trampa de hacer cosas ilegales, han puesto nuestros números de teléfonos privados con nuestros nombres al lado, en la televisión nacional. Yo me la he pasado recibiendo millones de llamadas y mensajes”, dijo.
Sin embargo, Bruguera aseguró que las llamadas y mensajes, contrario al propósito incriminador que parecía tener el oficialismo al exponer sus datos personales, habían sido para felicitarlos. “Nos han estado dando las gracias, pidiéndonos que continuemos”, explicó.
Según la artivista, le ha pasado a ella y a muchos de sus compañeros que, mientras han estado en colas para comprar comida, la gente le ha cedido el puesto o le han pedido entrevistas.
Bruguera recordó que había entregado una queja formal a la dirección del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) para comunicarle que estaban cometiendo una ilegalidad, pero que intentaría conducir sus exigencias a un nivel superior.
“Ahora estamos un grupo de nosotros trabajando con unos abogados para llevar una demanda judicial. Ya no es una queja o una carta de advertencia”, dijo la artivista, quien expuso que esperan poder enjuiciar a las personas que han estado difamando de otros en televisión, aunque reconoció que, dadas las condiciones del poder en Cuba, el resultado podría ser más simbólico que práctico.
La artivista, uno de los exponentes más relevantes del arte contemporáneo en la isla, ha sido objeto de ataque por parte del oficialismo y las instituciones gubernamentales desde hace varios años, pero su participación en la protesta del 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura en La Habana, reavivó las agresiones.
El noticiero acusó a la artista de ser uno de los "nuevos operadores de la contrarrevolución" y una "persona que desde una posición simbólica en el arte busca beneficio, busca posicionamiento", añadiendo que "algunas de sus acciones coquetean con la ilegalidad, incluyendo la organización de una provocación a la plaza de la revolución".
En otro intento por menoscabar la reputación de Bruguera, a comienzos de febrero el noticiero publicó conversaciones telefónicas de la artista. El vocero del noticiero, Humberto López, incluso cuestionó la calidad artística de Bruguera, cuya obra ha sido expuesta en importantes museos del mundo, como el Tate Modern de Londres o el Museo de Arte Contemporáneo de Chicago.
Filtrar, desde un medio de comunicación público, una conversación privada, representa un delito en muchos países del mundo que acogen una ley de protección de datos personales. No obstante, en Cuba la violación a la privacidad de los usuarios, bajo la existencia de una empresa única de telecomunicaciones, se ha vuelto una práctica bastante frecuente y sin repercusiones legales.
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