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El presidente Joe Biden anunció este lunes que ampliará la asistencia federal contra la pandemia a favor de pequeñas y medianas empresas del país, priorizando a propietarias mujeres y personas de la raza negra.
El mandatario expresó que los cambios entrarán en vigencia el miércoles y proporcionarán una ayuda largamente esperada a estas empresas más pequeñas que, según él, están siendo "aplastadas" por la recesión económica impulsada por la pandemia.
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"Las pequeñas empresas de Estados Unidos están sufriendo, están sufriendo mucho y necesitan ayuda ahora", dijo Biden.
Bajo el Programa de Protección de Cheques de Pago (PPP) del tiempo de pandemia, la administración está estableciendo un período de dos semanas, a partir del miércoles, en el que solo las empresas con menos de 20 empleados pueden solicitar los préstamos.
La actual administración también está repartiendo mil millones de dólares para destinarlos a propietarios únicos, como contratistas de viviendas y esteticistas, la mayoría de los cuales pertenecen a mujeres y personas de color.
Otros esfuerzos eliminarán la prohibición de otorgar préstamos a una empresa con al menos el 20% de propiedad de una persona arrestada o condenada por un delito grave no fraudulento en el año anterior, así como también permitir que aquellos atrasados en sus préstamos estudiantiles federales busquen alivio a través del programa. La administración también está aclarando que los residentes legales no ciudadanos pueden postularse al programa.
Lanzado por primera vez en los primeros días de la pandemia y renovado en diciembre, el programa estaba destinado a ayudar a mantener a los estadounidenses empleados durante la recesión económica. Permite a las pequeñas y medianas empresas que sufren pérdidas de ingresos acceder a préstamos federales.
Los datos del Programa de Protección de Cheques de Pago publicados el 1 de diciembre y analizados por The Associated Press (AP) muestran que muchos propietarios de minorías desesperados por un préstamo de alivio no lo recibieron hasta las últimas semanas desde que se implementara el programa, mientras que muchos más propietarios blancos pudieron obtener préstamos desde que se lanzó la política de ayuda.
El programa, que comenzó el 3 de abril y finalizó el 8 de agosto y otorgó 5,2 millones de préstamos por valor de 525 mil millones de dólares, permitió a muchas empresas mantenerse a flote cuando las medidas gubernamentales para controlar el coronavirus los obligaban a cerrar u operar a una capacidad reducida.
La última implementación del Programa de Protección de Cheques de Pago, que comenzó el 11 de enero y se extiende hasta fines de marzo, ya ha emitido $ 133.5 mil millones en préstamos, aproximadamente la mitad de los $ 284 mil millones asignados por el Congreso, con un préstamo promedio de menos de $ 74,000.
Una nueva renovación del programa no está incluida en el "Plan de rescate estadounidense" de $ 1,9 billones de Biden, que espera que el Congreso apruebe en las próximas semanas.
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