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Campesinos de Camagüey comenzaron a vender sus primeras reses, luego de que el gobierno eliminara la prohibición que pesaba sobre ellos de disponer de la carne y la leche de sus animales, una medida que busca desesperadamente aumentar la escasa producción de alimentos en el país.
Entre los beneficiados por la disposición se encuentra Rubén Pérez Benítez, ganadero que labora con su familia en una finca situada en el kilómetro 15 de la carretera a Vertientes, para quien la ansiada autorización constituye un estímulo para todos los productores.
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"Este es un momento que marca un antes y un después para nosotros, es un sueño hecho realidad. Es para los campesinos un orgullo poder sacrificar su animal para alimentar a la familia", dijo al periódico local Adelante.
"Todavía nos quedan siete animales por sacrificar en lo que queda de 2021 y lo vamos a hacer cuando queramos, es solo hacer la solicitud y en una semana a lo sumo ya está. Yo le puedo asegurar que como mismo lo logramos nosotros lo pueden hacer todos los que se lo propongan y trabajen para ello", subrayó.
Las autoridades de Camagüey estiman que este año más de 600 ganaderos podrían acogerse al nuevo plan del gobierno anunciado el pasado 13 de abril.
No obstante, hasta el momento solo se han vendido diez animales: seis pertenecientes a la Cooperativa de Crédito y Servicios (CCS) José Antonio Echeverría, del municipio cabecera, y otros cuatro de la Empresa Pecuaria Triángulo Tres, a la cual está adjunta la cooperativa.
Esa cifra tan baja podría estar relacionada con que los campesinos que quieran sacrificar animales de su rebaño para su consumo o comercialización tienen que cumplir antes una serie de requisitos.
Lo que es algo normal en cualquier país del mundo, en Cuba implica un proceso por el cual los productores están obligados a cumplir con el plan de entrega de carne o de leche, así como a garantizar el crecimiento de su masa animal.
Según la información de la Agencia Cubana de Noticias, los dueños de las reses aportaron un total de 1,200 libras de carne para la venta a la población en la comunidad Siete Palmas, localizada a 10 kilómetros de la ciudad agramontina. Posteriormente vendieron otras tres libras para cada una de las 358 viviendas de una circunscripción y realizaron una donación a 15 familias vulnerables.
Como si de un gran acontecimiento se tratara, a esta primera venta acudieron Ariel Santana Santiesteban, primer secretario del Partido en la provincia, así como las máximas autoridades del gobierno y la agricultura.
Para los próximos días se prevé comenzar los sacrificios de reses en los municipios de Najasa y Esmeralda.
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