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Una Argentina sosa (cabría decir, horrible) derrotó por la mínima a la débil Paraguay gracias a un gol temprano del Papu Gómez, en noche que marcó una de las peores presentaciones de la carrera de Lionel Messi.
Al principio muchos habrán imaginado que la albiceleste conseguiría un triunfo amplio, toda vez que recuperaba sin demasiado esfuerzo y llegaba con claridad a tres cuartos de cancha.
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El técnico Scaloni había optado por incluir al Kun Agüero en la partida titular, y por detrás de él plantó un trío formado por Messi, Di María y el usualmente menospreciado Papu Gómez. La zaga guaraní (nada que ver con las de antaño) alardeaba de incomunicación, y en una de esas le regaló un balón al Kun que éste, solo Dios sabe cómo, se ingenió para rematar por alto.
El juego apenas empezaba, y ya a los diez minutos haría acto de presencia el invitado. La Pulga le dejó la pelota al Fideo, y éste filtró un pase magnífico que el Papu tocó sutilmente hasta las redes. 1x0. ¿Acababa de inaugurarse el festival?
Pues mire usted, que no. Por el contrario, a partir de ese instante en la mitad inicial hubo un dominio alterno de la posesión y de las ocasiones, con Miguel Almirón y su velocidad provocando un sismo casi permanente en el nervio de la albiceleste.
Un capítulo aparte merece la permisividad del referee venezolano, cuyo protagonismo salió a relucir en varias faltas sancionables con tarjeta y misteriosas interpretaciones de las reglas. Daba la sensación de que ambos bandos se sentían al margen de su desempeño, y por ese camino Paraguay decidió frenar con faltas cada intentona albiceleste.
Luego, en el complemento, Paraguay mandó. Se adueñó de la esférica, vivió intentándolo en tres cuartos del rectángulo, pero sus limitaciones la condenaron una y otra vez. Argentina no daba con la tecla, y durante más de media hora dio una impresión de inferioridad que dejó en entredicho sus posibilidades reales de contender por el título con el todopoderoso Brasil.
El dato es lamentable: la albiceleste disparó una sola vez a puerta en la segunda parte del partido. Así, imposible.
Ahora, ya con el boleto cuartofinalista en el bolsillo, los bicampeones del mundo comandan el grupo A con siete rayas, seguidos por Chile (5), Paraguay (3), Uruguay (1) y Bolivia (0).
El certamen regresará al ruedo este miércoles con los duelos Ecuador-Perú y Brasil-Colombia.
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