Un cuentapropista cubano de la ciudad de Matanzas perdió su taller de electrónica luego de que la batería de litio de su motorina explotara.
Aunque el incidente no dejó víctimas mortales ni heridos, todo el taller quedó reducido a cenizas, contó en Facebook uno de los trabajadores identificado como Rigoberto Rodríguez.
El joven pidió a los clientes comprensión ante la pérdida de los equipos, y posteó imágenes de lo sucedido el viernes. Asimismo, pidió ayuda para el dueño del taller quien tiene un niño pequeño y actualmente no cuenta con recursos para levantar nuevamente su negocio.
Las llamadas motorinas (motos eléctricas), se han convertido en un peligro para los cubanos. Decenas de estos artefactos –populares en la isla ante la problemática del transporte público– han explotado en los últimos meses dejando viviendas destruidas, personas heridas y víctimas mortales entre las que se encuentran algunos niños.
Recientemente la corporación estatal cubana Cimex –que comercializa las motorinas– compartió en redes sociales una guía para el uso de las baterías de litio en motos eléctricas.
Esa entidad del gobierno cubano aconsejó evitar la sobrecarga y que las baterías se descarguen por completo, además de supervisar el proceso. De igual modo, indica no cargarla nunca cuando se regrese de un viaje, sino a temperatura ambiente.
Luego de un incidente donde un menor y dos adultos perdieron la vida en una casa tras la explosión de una moto, las autoridades del Cuerpo de Bomberos de la provincia de Sancti Spíritus, lugar del hecho, también explicaron las principales causas que han provocado, del 2020 hasta la fecha, 32 explosiones de motos eléctricas en la provincia.
El mayor Oreilys Quintero Pentón, jefe de Operaciones del Cuerpo de Bomberos en ese territorio, reveló que en lo que va de año ya se han registrado 17 explosiones de motos eléctricas en el territorio espirituano.
Explicó que “las reacciones generadas por el litio, un componente que se encuentra en el interior de las baterías y que es explosivo cuando se violan los parámetros técnicos” constituye una de las causas de las explosiones.
“Es muy común la violación del tiempo de reposo requerido después de ser usada la moto. No se espera el tiempo adecuado para conectarla al cargador, el cual no debe estar por debajo de los 45 minutos, como tampoco debe ponerse a rodar inmediatamente después de haber completado la energía, pues se exige de un margen de espera para que el litio se enfríe”, señaló.
A pesar del riesgo, los cubanos continúan usando estos equipos ante la crisis del transporte en la isla, donde se carece de medios para la movilidad de la población en algunas zonas del país.
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