Boxeador Óscar de la Hoya hospitalizado con coronavirus

El legendario boxeador Óscar de la Hoya compartió este viernes con sus seguidores la noticia de su positivo al coronavirus, del que se contagió justo días antes de su regreso al cuadrilátero el próximo fin de semana.

“Quería que escucharas directamente de mí que, a pesar de estar completamente vacunado, contraje COVID y no voy a poder pelear el próximo fin de semana. Prepararme para este regreso ha sido todo para mí durante los últimos meses y quiero agradecer a todos por su tremendo apoyo”, escribió el boxeador en su cuenta de Instagram.

Visiblemente afectado por su mala fortuna, el deportista compartió sus sentimientos en video subido a esta red social. “No sé cómo ha podido ocurrir. He tomado todas las medidas de precaución durante mis entrenamientos. Realmente esta situación me fastidia mucho”, dijo De la Hoya desde la cama del hospital donde se encuentra recuperándose.

“Actualmente estoy en el hospital recibiendo tratamiento y estoy seguro de que volveré al ring antes de que termine el año. Dios bendiga a todos y cuídense”, añadió el púgil en su post de Instagram.

En agosto de 2020, el mítico boxeador mexicano declaró que planeaba retornar al boxeo profesional a sus 48 años, luego de transcurridos 13 años de su retiro de los cuadriláteros, tras caer derrotado en 2008 frente al filipino Manny Pacquiao.

La plataforma de entretenimiento Triller Fight Club apostó por el regreso del boxeador, que fuera medallista de oro en las olimpiadas de Barcelona 1992 y campeón de boxeo profesional en seis divisiones, a pesar de su considerable edad (48 años) para competir en este deporte.

A finales de marzo, el director ejecutivo de Proxima Media -la empresa matriz de Triller-, Ryan Kavanaugh, dijo a ESPN que él y De La Hoya eran “muy amigos” y que habían estado discutiendo el regreso del boxeador durante “mucho tiempo”.

También anunció que el cartel con el regreso del boxeador mexicano estaba previsto celebrarse el pasado 3 de julio, pero se desconocía quién sería su rival. Según Kavanaugh, el regreso de De La Hoya posiblemente tendrá lugar en el estadio AT&T de Texas, y su adversario será un "grande", aunque no reveló su identidad.

“Ha estado [entrenando] y, en sus propias palabras, es más fuerte y mejor que nunca”, consideró el manager. Sin embargo, medios especializados consideraron que De la Hoya había perdido la velocidad de sus piernas y que su venenoso ‘jab’ se había llenado de óxido.

“Bien parecido, educado, con un boxeo artístico, cantante y promotor exitoso después de su retiro, Óscar de la Hoya fue en sus tiempos de gloria un imán para los empresarios del boxeo. En 19 peleas de ‘pay per view’ (PPV) generó unos 700 millones de dólares”, recordó el Excelsior de California.

Para algunos de los entrevistados por este medio, el regreso de tan afamada figura “demuestra que el boxeo está viviendo un momento de crisis, sin peleas buenas porque los mejores no quieren pelear con los mejores. Entonces los combates nostálgicos llenan el vacío”.

Estas palabras, declaradas para la agencia EFE y recogidas por el citado medio fueron dichas por Jorge Ebro, columnista del Miami Herald, quien -además-, consideró que estos carteles le faltan el respeto a los púgiles en su esplendor, y al entrenamiento de meses que sufren antes de una pelea importante, pero peor pagada que los carteles de “señores con la vista cansada”.

“Como en otros aspectos de la vida, la venta de humo es más apreciada y un señor de 48 años como Óscar de la Hoya garantizará más billetes verdes. No importa si se ve lento y en el ring hace más esgrima que boxeo”, añadió.