La Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA) anunció que impulsará un proyecto para la "elaboración sostenible de leche de cabra y sus derivados" en tres municipios de La Habana.
El proyecto se anuncia en una etapa de crisis de alimentos en Cuba y especialmente de escasez de leche. No ha sido el primero de su tipo en el país, y los que le han antecedido no han logrado cumplir con la demanda de lácteos en la isla.
El gobierno de La Habana se apoya en un equipo del Instituto de Ciencia Animal, en Mayabeque, que ya trabaja en el montaje de una planta para la producción de leche de cabra en la Cooperativa de Créditos y Servicios Arides Estévez, ubicada en el municipio Playa.
Indicaron que utilizarán una técnica de activadores ruminales, que son "productos capaces de manipular los procesos fermentativos que se producen en el rumen e incrementar la utilización digestiva de los alimentos que consumen los animales con vista a la obtención de leche, carne y lana".
La presidenta de la ACPA en La Habana, Aurelia Castellanos Quintero, dijo que el proyecto del gobierno está en proceso de montaje y aseguró que el activador ruminal está destinado también a las cabras de La Lisa y Marianao, para que con su "consumo de forma eficiente se multipliquen las producciones de leche y carne, sobre la base de contribuir al desarrollo local".
La escasez de leche en Cuba es tal que la semana pasada el gobierno cubano informó su incapacidad de cubrir las dietas médicas de leche en polvo. Ese producto estaba destinado a personas con problemas de salud graves o crónicos.
La ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, reconoció que la leche en polvo es el producto de la canasta básica más difícil de mantener por la interrupción en los ciclos de aprovisionamiento a la red de bodegas y demoras en la importación.
A lo largo de más de 60 años los líderes políticos cubanos han prometido que solucionarán la escasez de leche pero no lo han logrado. Raúl Castro, por ejemplo, abandonó su mandato político del país sin cumplir la promesa de garantizar leche para todos los habitantes de la isla.
Había hecho su promesa como gobernante en 2007, en un discurso en que criticó que los cubanos solo recibieran leche hasta los siete años y aseguró que eso debía cambiar. Castro dejó el Consejo de Estado sin transformar esa realidad y además ahora tampoco recibirán leche las personas con padecimientos de salud.
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