Del 20 al 30 de abril acontecerá en La Habana la edición 30 de la Feria Internacional del Libro, evento dedicado a México y que debió ser pospuesto a causa de la crisis sanitaria del coronavirus.
Tras el capítulo del certamen en la capital del país, este se extenderá al resto de las provincias, donde se recordarán el 120 aniversario del natalicio de Nicolás Guillén, los centenarios de Carilda Oliver Labra y Jesús Orta Ruiz "El indio Naborí", los 140 años de la publicación del poemario Ismaelillo de José Martí y de la novela Cecilia Valdés o La Loma del Ángel de Cirilo Villaverde, según una nota de prensa del Instituto Cubano del Libro.
La Feria dedicará sus jornadas a los intelectuales Luis Álvarez Álvarez, Premio Nacional de Literatura en 2017, y Alberto Prieto Rozos, Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas.
Además de su sede habitual en la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, durante esta próxima edición se trasladará hacia otros espacios en el Centro Histórico de La Habana y otras 11 subsedes en El Vedado, La Finca de los Monos y la Feria Agropecuaria de Rancho Boyeros.
Los organizadores dijeron que durante los últimos cuatro días del certamen, las actividades se extenderán hasta todos los municipios de la capital, a pesar de que las cifras de contagios de COVID-19 todavía se mantienen elevadas, por encima de los 500 casos diarios.
Hasta el momento, no han revelado detalles sobre cómo se realizará la Feria del Libro en el resto de las provincias del país, a donde suelen llegar los títulos menos vendidos en La Habana, a partir de las existencias en las editoriales de los territorios, que cada año logran imprimir una menor cantidad de textos.
La edición 30 de la feria debía realizarse en febrero de 2021, sin embargo, el panorama epidemiológico de la isla impidió sus actividades, caracterizadas por gran concurrencia de público y colas larguísimas para adquirir los libros y los otros productos asociados que se comercializan por marcas internacionales.
Ya sea por la política editorial de las instituciones cubanas, por su falta de presupuesto, problemas de comercialización o por la censura, el espacio editorial cubano es muy reducido y la Feria del Libro se convierte en una de las escasas oportunidades que tienen los lectores nacionales para conocer las novedades literarias, así como de hacerse con algunos de los pocos ejemplares que las editoriales extranjeras ponen a la venta.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: